El zapatazo que metió el Kily González para decretar el 3 a 1 parcial sobre Estudiantes, le debe haber dolido tanto a los hinchas del Pincha, como al capitán canalla. Es que el mayor de los González, producto de haber pisado mal en la primera mitad del juego, habría sido infiltrado en su tobillo izquierdo durante el descanso, para poder continuar el partido. Ahora a 5 días del choque ante River en el Monumental, la única preocupación del cuerpo técnico encabezado por Pablo Sánchez, pasa por saber si podrá contar o no con el experimentado volante.
Por demás de conforme con el rendimiento de su dirigidos, Vitamibna solo piensa en cómo acomodar sus piezas si es que finalmente el Kily no llega en condiciones para el trascendental partido del próximo domingo. Una de las posibilidades es que ingrese el Yacaré Nuñez, que posee características similares de juego, o bien probar con el ingreso de Omar "Doctor Zhivago" Sarif que se ubicaría por el sector derecho y correrlo a Jesús Méndez a la posición que habitualmente ocupa el capitán.
De cara a la tribuna. El arquerito Jorge Broun todavía no puede creer el gol que se comió por festejar, de espaldas al juego, el golazo que acababa de convertir el Kily González. El pibe que disputaba su primer gran partido como titular en el arco canalla, le pidió disculpas a los hinchas inmediatamente después de esa desgraciada jugada (elevando sus manos unidas en forma de plegaria) y en las declaraciones posteriores ante cuanto micrófono le pusieran delante. Y lo mismo hizo con el técnico Sánchez que al término del partido había expresado: "A Central en el resto de su historia no le deben marcar un gol de esta manera. Fue un error de Broun, que él mismo me reconoció y que no tendrá que cometer más".
