10:05- Este martes dieron comienzos los juicio orales respectivos por la tragedia en Cromañón y el por el caso del sacerdote imputado por abuso sexual contra tres chicos de la Fundación Felices Los Niños. En cuanto al primero, el debate estará centrado en si Omar Chabán, la banda Callejeros y otros imputados se representaron en la discoteca donde en 2004 perdieron la vida 194 personas sabían que allí se podía producir un siniestro de ese tipo y, raíz de eso, morir personas. En cuanto al cura, se tendrá que defender de las imputaciones sobre reiteradas acciones de abuso sexual.
Cromagnon. Para la fiscalía, en la causa hay numerosas pruebas para dar por acreditado que Chabán, gerenciador del boliche, debió haberse imaginado lo que iba a ocurrir, en razón de los incendios ocurridos en el local el 1 de mayo y 25 de diciembre de 2004 por uso de pirotecnia.
"Habiendo mantenido constantes los factores que en ocasiones anteriores confluyeron para la creación del fuego (paneles, media sombra y público que había dado muestras de su afición a la pirotecnia), Chabán carecía de motivos razonables para confiar en que no se produciría nuevamente un episodio de tales características", sostiene la elevación a juicio de la causa.
Cuando declaró, el empresario aseguró que recomendó a los hombres de seguridad de Callejeros que fueran exhaustivos con la revisión y que cuando vio que tres jóvenes de unos 20 años, vestidos con pantalones cortos y sin remeras, irrumpieron cerca del escenario con candelas, interrumpió el recital, pero no pudo hacer nada para frenar el siniestro.
"Chabán no es responsable de la tragedia y vamos a demostrar que el incendio fue intencional. Después del recital se secuestraron más de 50 artefactos de pirotecnia, pero si nadie hubiera tirado las bengalas, esto no hubiera ocurrido", dijo a Télam Pedro D’Attóli, abogado del ex gerenciador de Cromañón.
Sobre todas las acusaciones que la fiscalía le endilga a Chabán, D’Attóli sostuvo que "el responsable de la habilitación y todas esas cuestiones era la firma Central Park, a la que Chabán le alquilaba el local; él sólo organizaba recitales".
Sobre la cuestión principal a debatir, el abogado Patricio Poplavsky, uno de los cuatro querellantes del juicio, sostuvo que "no hay dudas de que el hecho se trata de un estrago doloso, pero las defensas van a tratar de que la figura sea culposa para que sea excarcelable".
"En este juicio, la lucha va a estar entre el dolo y la culpa, pero los familiares quieren justicia y una condena efectiva para todos los imputados", señaló. Al elevar el caso a juicio, el fiscal Juan Manuel Sansone reconoció que será "problemático" en el juicio oral probar que el ex gerenciador del local se haya representado el resultado "muerte" debido "al comportamiento contradictorio de Chabán".
En el caso de Callejeros, ni los músicos ni sus abogados respondieron a las consultas realizadas. Pero un allegado a la banda dijo que en el juicio argumentarán que "ellos eran músicos que iban solamente a tocar y no entendían nada de seguridad ni de habilitaciones, por lo que nunca se iban a imaginar que sus recitales iba a haber un incendio".
"Mantienen algunas diferencias y terminarían poniendo distintos abogados ya que podrían acusarse entre si. Sólo los une el espanto de considerarse inocentes y tener que e ir a un juicio oral por 194 muertos", concluyó.
Durante el proceso, los imputados estarán protegidos tras un blínex y, luego del juicio, se calcula que las sentencias se conocerían dentro de siete meses.
Caso del cura Grassi. El sacerdote imputado por abuso sexual contra tres chicos de la Fundación Felices Los Niños, dijo que se siente "tranquilo" ante la inminencia del proceso. "Me salgo de la vaina para tratar de hablar, explicar, discutir con personas que dicen cosas que son mentiras”, señaló.
El religioso será juzgado a partir de este martes por abuso sexual y corrupción de menores agravada por su condición de cuidador de tres niños, quienes ya son mayores de edad, que concurrían a su Fundación, en un proceso judicial que demoró seis años.
El juicio se inició a las 9 en los Tribunales de Morón y estará a cargo del Juzgado en lo Criminal número 1.
Grassi en declaraciones al canal de noticias C5N dijo que en los últimos tiempos se preparó "tratando de leer los principales testimonios de la causa, reflexionar y buscar pruebas".
Voy muy tranquilo frente a un esquema y un lugar que desconozco, nunca he pasado por un juicio oral", al que calificó de proceso "muy doloroso", pero no obstante dijo estar "tranquilo" y que se prepara "con mucha oración".
Grassi dijo que "la oración" le da "mucha paz" y se definió como "un hombre que trabaja para Dios".
"No soy un santo de estampita, soy un hombre común, alguien que accedió al sacerdocio, no porque fuera el mejor sino porque Dios me necesitaba y dentro de esta sencillez trato de servir a Dios", sostuvo.
En tanto, uno de sus abogados defensores, Daniel Cavo, dijo: "confiamos absolutamente en el tribunal, están todas las garantías iniciales". El sacerdote será defendido también por los abogados Ricardo Malvicini y Martín Tipito y será juzgado por once hechos de abuso contra el menor Luis, tres contra Gabriel y otros contra Ezequiel.