Las voces celebratorias de los grandes empresarios del sector industrial, que estuvieron en la Casa Rosada en el anuncio, fueron las primeras en difundirse respecto de la decisión del gobierno nacional de cancelar la deuda de más de 6.700 millones de dólares con el Club de París. Elogios llegaron también de gobernadores oficialistas y hasta de Julio César Cleto Cobos, el vicepresidente distante. Todos coincidieron en la importancia del pago para una mejor posibilidad de acceso de la economía nacional a financiamiento internacional. También el líder de la CGT Hugo Moyano saludó la “apertura de líneas de crédito internacional”; pero a la vez señaló que el anuncio de Cristina “les saca el discurso a los neoliberales, que permanentemente criticaban”.
El discurso es el discurso. En cuanto a la plata para pagar, la presidenta anunció que se apelará a las las reservas nacionales del Banco Central.
El empresario Enrique Pescarmona sostuvo que saldar la deuda con el Club de París "es una medida muy importante e impactante", como también "muy beneficiosa para todo el país". Para Pescarmona, el anuncio "renueva la confianza en nuestro sistema financiero de pagar en tiempo y forma". El empresario subrayó que saldar el compromiso financiero permitirá "primero bajar el riesgo país, y segundo abrir la posibilidad de importar equipos y bienes de capital a largo plazo que no se producen en el país, entre otros beneficios".
En tanto, el titular de Fiat de Argentina, Cristiano Rattazzi, calificó de "sumamente importante" para la Argentina el anuncio, "porque nos permitirá avanzar en forma muy positiva". "Me sorprendió en forma muy positiva el anuncio presidencial y felicito a la Presidenta de una Argentina importante que quiere y puede avanzar", sostuvo el empresario. Rattazzi lamentó que "no estaban los representantes del campo porque hoy tenía que ser un día importante, de un placer nacional ya que se sale adelante y se evitan roces con otros países". Aseguró también que la Argentina "avanzará en el sistema internacional financiero que es el que nos pude hacer vivir con nuevas inversiones a tasas razonables y no como las últimas que pagamos a nivel internacional".
Juan Carlos Lascurain, de la Unión Industrial, consideró que cancelar esta deuda, de más de 6.700 millones, apuntalará a todo el sector industrial “que este año se estima crecerá un 7 por ciento”.
Entre los gobernadores que presenciaron el importante anuncio, Jorge Capitanich (Chaco) manifestó que el pago al Club de París “generará un impacto positivo en el mercado bursátil” porque “reduce la vulnerabilidad del sector externo del país”.
El bonaerense Daniel Scioli, por su parte, calificó la decisión como “una decisión estratégica que nos abre la posibilidad en nuestra provincia para que lleguen más inversiones productivas".
“Ya nadie puede dudar el rumbo de la Argentina con un capitalismo maduro e inclusión social para todos", afirmó Scioli.
Desde la edición digital del diario Infobae, el diputado justicialista disidente Francisco de Narváez fue otro de los que felicitó a la presidenta por la decisión de cancelar la deuda con el Club de París, al afirmar que "pagar las deudas es el primer paso para que nuestro país vuelva a ser confiable, previsible y respetado".
Por el lado de Cobos, que no estuvo en el anuncio en la Rosada, la lectura fue que "se generarán mejores condiciones para la inversión futura". "Con este pago habremos honrado nuestros históricos compromisos", agregó el vicepresidente distante a través de un comunicado, en el que se señaló que la regularización de la situación con el club de París era solicitada desde hace tiempo por diferentes países del mundo.
Entre los que sí estuvieron en Casa de Gobierno cuando la presidenta hizo el anunció se cuenta el líder cegetista Hugo Moyano: "La decisión de pagar al Club de París produce la apertura de líneas de crédito internacional y, además, les saca el discurso a los neoliberales, que permanentemente criticaban", fue su opinión.
Por estas horas, las agencias de noticias y los grandes diarios nacionales están dando cuenta además de las repercusiones internacionales del anuncio y de sus buenos efectos en los mercados bursátiles. Y van apareciendo los primeros análisis de las espadas de los grandes medios, como la nota de Julio Blanck, en Clarín, titulada “Cristina vuelve al mundo”.
