El diputado socialista Roberto Drisun cargó duro este jueves contra los legislasdores peronistas. Los acusó de practicar una “política esquizofrénica” ante la convocatoria al diálogo sobre la cuestión impositiva que realizara el presidente de la Cámara de Diputados Eduardo Di Pollina. Desde el peronismo dicen que el llamado al diálogo debe surgir del Ejecutivo.
Drisun sostuvo que los legisladores del PJ “manifiestan que quieren dialogar pero no lo hacen”. Y añadió que, en realidad, “no hay tal contradicción” porque “los representantes de la vieja política no tienen propuesta para superar la compleja realidad en que han dejado a la provincia de Santa Fe”.
“El PJ sólo se contenta con su política clientelar intentando respaldar a sus dirigentes de municipios y comunas con sendos proyectos (votados en el Senado sin debate previo) modificando las pautas de coparticipación y, luego, con una cuota más de Impuesto Inmobiliario urbano y rural. Estas propuestas son un no proyecto para la Provincia, son tan sólo un parche”, continuó Drisun, para quien “el proyecto del gobierno provincial es el único que plantea soluciones de corto y mediano plazo. Mediante una corrección de las imposiciones tributarias se propone recaudar más fondos para realizar los proyectos que votó la ciudadanía y, por otro lado, para contribuir a aliviar la situación acuciante de municipios y comunas”.
“Parece ser que, a partir de su mayoría en el Senado Provincial, la opción planteada por el PJ es cogobernar o poner palos en la rueda, obstruyendo la labor del gobierno”, concluyó el diputado socialista.
El embate de Drisun se da luego que el presidente del PJ provincial y senador Ricardo Spinozzi insistiera en que el diálogo debe ser convocado por el Ejecutivo, que debe participar de las negociaciones.
El llamado a conformar un espacio de conversaciones sobre la cuestión tributaria, la distribución geográfica de los recursos estatales y el presupuesto surgió la semana pasada, luego que el peronismo rechazara el proyecto de aumento y modificación de impuestos que impulsaba el gobierno de Hermes Binner y que, posteriormente, el oficialismo hiciera lo propio con el proyecto de instrumentar una quinta cuota del impuesto inmobiliario destinando todo lo recaudado a municipios y comunas.
