Líderes regionales de campesinos paraguayos anunciaron que propondrán al gobierno la prohibición del cultivo de soja en lo que resta de 2008, en los norteños departamentos de San Pedro y Concepción. Si la solicitud no es aceptada, actuarán por cuenta propia para impedir la siembra.
"Está comprobado el uso indiscriminado de agrotóxicos como plaguicidas en plantaciones cercanas a pueblos, escuelas y cursos de agua produciendo contaminaciones perjudiciales; entonces, pedimos al gobierno que por este año se prohíba la siembra de soja", dijo en guaraní Casildo López, dirigente de la organización Lucha por la Tierra, durante una entrevista con la radio católica Cáritas.
La Unión de Gremios de la Producción (UGP), –quien había amenazado al entonces candidato y hoy presidente Lugo durante la campaña “que ni se le ocurra poner retenciones a la soja”–, emitió un comunicado la semana pasada anunciando que sus asociados no podían preparar la tierra para iniciar el nuevo periodo 2008-2009 de cultivo de la oleaginosa, por las presuntas amenazas de invasión a sus propiedades por parte de campesinos.
Paraguay tiene previsto cosechar a fines de noviembre ocho millones de toneladas del grano por 2.600.000 hectáreas de cultivo. Es el tercer productor de América del Sur detrás de Brasil y Argentina.
López anticipó que si el gobierno no escuchare sus reclamos "por nuestra cuenta impediremos la siembra en los departamentos de San Pedro y Concepción", a 340 y 500 kilómetros al norte de Asunción. Agregó que "queremos que hasta los pecuarios regulen su producción".
La emisora católica, posteriormente, en su editorial, apoyó a los labriegos señalando que "la gente vale más que toneladas de soja".
Alberto Alderete, director del Instituto estatal del Desarrollo Rural y la Tierra (Indert), aclaró a los periodistas que el lunes "presenté al presidente Fernando Lugo el plan de contingencia campesina para, inmediatamente, comenzar a otorgar asistencia de alimentos, créditos blandos, semillas más la búsqueda de profesores capacitados para enseñar en las escuelas rurales".
"Esta será la verdadera reforma. El plan nuestro no es de izquierda, centro ni de derecha. Es un programa práctico que no admite debates. Tenemos que actuar ya en favor de los compatriotas pobres que llevan años de postergación", apuntó.
Con relación a la supuesta mala utilización de los plaguicidas químicos, Alderete indicó que "tras las denuncias deben actuar los fiscales ambientales".
(Fuente: AP)