Por primera vez desde que comenzaron los desencuentros entre oficialismo y oposición el gobernador Hermes Binner se corrió de su habitual prédica de diálogo y consenso para acusar al PJ: “Lo que se pretende es no dejar gobernar la provincia de Santa Fe”, dijo este jueves en Rosario. También pronosticó que “la situación va a ser compleja porque se está cerrando la oposición”. El peronismo santafesino difundió un comunicado en el que señala que “no llevaremos a cabo ninguna acción que implique dejar a la provincia sin presupuesto” ante la negativa del Frente Progresista de tratar en la sesión de este jueves la ley de leyes. A pesar de un inicio de diálogo entre el ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Antonio Bonfatti, y el senador Ricardo Spinozzi, la pelea política no terminó.
Con una dureza inusual en su estilo apuntó el gobernador Binner al Partido Justicialista de Santa Fe, al asegurar en Rosario que la oposición pretende “no dejar gobernar la provincia de Santa Fe”.
Esa misma frase había usada en plena disputa política por sus principales referentes legislativos, como el diputado Raúl Lamberto y el senador Juan Carlos Zabalza. Pero Binner decía entonces que la Legislatura es el lugar del diálogo y donde están representados todas las fuerzas políticas de Santa Fe.
Por eso sorprendió este jueves cuando se despachó: “La situación va a ser compleja, porque se está cerrando la oposición en no tratar absolutamente nada”. Más distendido, el mandatario bromeó al asegurar que “el Frente Progresista tuvo un gran éxito que nadie pudo lograr, que es unir al justicialismo”.
Incluso, Binner insistió en dar a conocer a la población “lo que ocurre puertas adentros de la provincia de Santa Fe” ya que, dijo, “queremos que la gente sepa lo que pasa” y “saque sus conclusiones”.
Ya en otras oportunidades el PJ le había recordado al gobernador que sus legisladores provinciales habían aprobado todas las propuestas enviadas por el Poder Ejecutivo, con excepción de la reforma tributaria, que la oposición calificó como “un impuestazo”.
Aunque nadie en el oficialismo lo vaya a reconocer, el PJ terminó haciéndole un favor a la Casa Gris, por cuanto frenó un incremento de impuestos unos días antes de que estallara la crisis financiera internacional, por la cual hoy los gobiernos piensan en reducir la presión fiscal con el fin de alentar las inversiones productivas.
Desde el justicialismo, sus legisladores firmaron un comunicado en el que aclaran que no son ellos quienes se niegan a aprobar el proyecto de presupuesto 2009, sino los propios diputados y senadores del Frente Progresista.
“Entendemos que (el presupuesto) es una herramienta tan importante –independientemente de nuestro acuerdo o desacuerdo con su contenido– que no puede ni debe serle negado a quienes tienen la responsabilidad de administrar”, señalaron en un comunicado.
Tras recordar que entre 2003 y 2007 –cuando eran oposición– el socialismo, el ARI y el radicalismo votaron siempre en contra los presupuestos enviados por el Ejecutivo, los legisladores peronistas señalaron: “Dejamos en claro que desde el peronismo, aun señalando objeciones y desacuerdos, no llevaremos a cabo ninguna acción que implique dejar a la provincia de Santa Fe sin presupuesto”.
El proyecto de presupuesto tiene pedido de preferencia para ser tratado este jueves en la sesión de la Cámara de Diputados. Pero el oficialismo quiere posponer la discusión para las sesiones extraordinarias (la de hoy es la última ordinaria) cuando el Frente Progresista y el PJ arriben a un acuerdo político que incluya, también, alguna forma de financiación a municipios y comunas. Continuará.
