El Ministerio de Trabajo de la provincia dictó este miércoles la conciliación obligatoria por quince días hábiles en torno al conflicto laboral desencadenado en la fábrica de aros para pistones. Delegados de la planta ubicada en avenida Juan Perón al 5600, junto a dirigentes de la UOM y el jefe de recursos humanos de la firma de capitales alemanes rubricaron la determinación. La planta estaba paralizada desde el martes a la mañana en reclamo de la reincorporación de dos operarios cesanteados.

Roberto Campos, delegado de planta, le dijo a redaccionrosario.com que este miércoles ambas partes se presentaron en la sede local de la cartera de trabajo santafesina y acataron la conciliación obligatoria. En rigor, la medida de fuerza que venían llevando adelante los trabajadores queda sin efecto, como así también los despidos de dos obreros notificados por la firma el fin de semana pasado, que fue el detonante del conflicto.

“Todo vuelve a foja cero. Si bien retomamos nuestras tareas habituales, nos mantenemos en alerta, ya que el viernes estamos citados a una nueva reunión conciliatoria con la empresa en el Ministerio de Trabajo para ver cómo sigue todo”, comentó Campos.

Autoridades de la empresa que se dedica a la fabricación de aros y camisas de pistones para motores presentaron la semana pasada un procedimiento preventivo de crisis ante los funcionarios del Ministerio de Trabajo. Antes del análisis de esta documentación, la firma envió dos telegramas de despido para dos operarios que tienen alrededor de veinte años de planta.

La respuesta de los trabajadores el martes a la mañana –el lunes fue feriado– fue paralizar la producción y declararse en estado de asamblea permanente. El reclamo era la reincorporación de los empleados cesanteados y que la empresa termine con sus “políticas autoritarias”. Delegados de planta informaron que la empresa los filma y los presiona todo el tiempo.

Por su parte, Aldo Fabucci, director de la región sur del Ministerio de Trabajo de la provincia, confirmó el dictado de la conciliación obligatoria por diez días en relación al conflicto laboral de la fábrica Mahle, donde antes funcionaba Dana Rosario. El funcionario de la administración provincial dijo que las partes volverán a sentarse el viernes que viene a la mesa de negociaciones, “aunque esto no quita que haya reuniones extraministeriales antes de ese encuentro”. “Todo se retrotrae y todas las medidas quedan sin efecto”, indicó Fabucci.

Mahle es una fábrica autopartista que emplea directamente a más de 400 operarios, aunque con las firmas tercerizadas esa cantidad de empleados se duplica. Esta fábrica se llamaba Dana y antes era Danery, hasta que en mayo de 2007 pasó a manos de este grupo industrial alemán, que además se quedó con la fábrica de válvulas Edival de Rafaela. Buena parte de su producción se exporta, aunque los aros y las camisas de pistones también se comercializan en automotrices locales. Uno de los delegados indicó que la planta de avenida Juan Perón al 5600 factura siete millones de pesos mensuales.

Según denunciaron los trabajadores, desde que Mahle desembarcó en Rosario, en mayo de 2007, se produjeron alrededor de 90 despidos. 

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