“Binner parece ángel pero es un demonio”, se había despachado Carlos Reutemann. “Mi mamá me decía lo mismo cuando hacía una travesura”, respondió Hermes Binner. Así andan las cosas en la interna suizo-alemana.
Binner recordó su infancia este viernes en diálogo con radio 2, para salir al cruce del calificativo de “demonio” que le había lanzado en la víspera un Reutemann muy locuaz en estos días.
El gobernador dijo que no tenía problemas en disculparse con el Lole, que se lo pidió expresamente apuntando particularmente al tema privatización del Banco de Santa Fe, pero al mismo tiempo sugirió al senador nacional que “busque Justicia” en torno a varios hechos que se dieron cuando fue gobernador, incluido lo de la entidad financiera que, según Binner, ahora es imposible estatizar.
Claro que no es lo del banco el principal cuestionamiento del mandatario provincial a Reutemann. Los cañones apuntan más a diciembre de 2001 y a la inundación en Santa Fe. Todo, en el marco de la pelea electoral que este año tiene el capítulo legislativo nacional, en el que el Lole baraja participar activamente, buscando su reelección como senador, en su declamado intento por llegar a la Casa Rosada, anhelo que también expone el gobernador santafesino.
Binner también habló este viernes con periodistas de LT8, en este caso sin referencias a lo de “demonio”, mientras estaba en el teatro el Círculo de Rosario encabezando un acto de titularización de cargos docentes y a la espera de la llegada de la presidenta, en suspenso por las inclemencias climáticas.
En ambos contactos con las radios rosarinas, el gobernador insistió con su pedido de eliminación de las retenciones y liberación de las exportaciones y, consultado por el nuevo lock out lanzado por los propietarios rurales, contestó que “todos tienen derecho a hacer medidas de fuerzas”. “Es una decisión del campo después de tantas demandas no atendidas”, completó.