En un verano en el que el debate político parece no tomarse descanso, el diputado Marcelo Gastaldi desafió al oficialismo a armar una agenda de trabajo que priorice a Rosario por encima de los intereses partidarios cuando éstos son “mal entendidos”: “Hay un antecedente embrionario en este sentido y fue la reunión que realizamos diputados de la oposición con el ingeniero Miguel Lifschitz y dos de sus secretarios (Santiago Asegurado y Horacio Ghirardi) cuando le afirmamos nuestra vocación de poner el hombro para que la Ciudad se viera beneficiada por decisiones que tuvieran que ver con la Legislatura”.

El legislador rosarino, realizó una apretada síntesis del temario de aquel encuentro y se permitió evaluar de manera positiva los logros alcanzados: “Entiendo que aquel encuentro tuvo resultados positivos, ya que si recordamos los temas con impacto en las finanzas locales más importantes: fondos para la alta complejidad de la Ciudad de Rosario, distribución del fondo soja 50% y 50% para la Provincia y gobiernos locales se incorporaron en el presupuesto 2010 con claros beneficios para las arcas del Municipio y el tema de la autonomía municipal –como contenido institucional excluyente- cuenta con dos proyectos, uno nuestro y un mensaje del Poder Ejecutivo, con posibilidades de discutirse en el período extraordinario”.

Gastaldi evaluó con dureza la actitud de Lifschitz respecto de los vetos del gobernador Hermes Binner: “Si el mismo veto lo hubiese realizado un gobierno justicialista, el intendente estaría planteando hasta una denuncia por discriminación en el INADI; hoy su actitud es complaciente, cómplice, temerosa y contradice su prédica de años en el sentido que siempre priorizaría los intereses de la Ciudad por encima de los gobiernos provinciales de turno”.

Es necesario recordar que el legislador rosarino viene denunciando que los vetos de Binner le restan 45 millones de pesos al municipio rosarino. Gastaldi hizo hincapié en dos artículos vetados: el referido a la distribución 50% y 50% entre municipios y provincia del denominado Fondo Soja, que vuelve al arbitrario 70% y 30%, en detrimento de los gobiernos locales, y al que deja sin efecto la moratoria aprobada por ambas Cámaras. La suma de ambos ítems se calcula en 155 millones de pesos para coparticipar entre los gobiernos locales, de los cuales el 30% corresponden que ingresen a la Municipalidad de Rosario. “Lifschitz debería tener la valiente decisión de convocar en los próximos días a los legisladores de las distintas fuerzas políticas, a los concejales, a las fuerzas vivas de la Ciudad, al Consejo Económico y Social y a todos los actores de la vida rosarina para defender lo que nos corresponde”.

Para finalizar, y dudando de la voluntad política del intendente, el diputado justicialista afirmó: “Nosotros no dudaremos en volver a pedirle una reunión, que incluso la haremos extensiva a los legisladores del Frente Progresista, ya que oficialismo y oposición debemos ser capaces de construir una agenda común para la Ciudad”.

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