“No más presos por plantar» y “Despenalización ya” fueron algunas de las consignas que aglutinaron a miles de jóvenes en todo el mundo por la autorización del libre uso de la marihuana. En nuestra ciudad, los militantes verdes marcharon rumbo al Monumento.
La Marcha Mundial de la Marihuana se realiza hace más diez años en unas 200 ciudades de distintos países; en el nuestro, se evidenciaron demostraciones a favor de la despenalización de la plantita verde en Bahía Blanca, Bariloche, Comodoro Rivadavia, Córdoba, El Bolsón, Formosa, General Roca, La Plata, La Rioja, Mar del Plata, Mendoza, Neuquén, Oberá, Paraná, Resistencia, Río Grande, Rosario, Salta, Catamarca, San Juan, San Luis, Tucumán, Jujuy, Santa Fe, Santiago del Estero, Trelew, Venado Tuerto y Ushuaia.
En Rosario, los manifestantes se congregaron el sábado a la tarde, más específicamente a partir de las 17 en Plaza San Martín desde donde partieron hacia el Monumento a la Bandera. Previamente, se llevó a cabo un acto frente a la sede local de la gobernación de la Provincia.
Pablo Ascolani, de la Asociación Rosarina de Estudios Culturales (AREC), explicó: “Como todos los años, nos reunimos para pedir cambien la política de ley de drogas; básicamente se deje de considerar un criminal a la persona que usa sustancias ilegales”.
En efecto, la Ley 23.737 de 1989 puesta en cuestión castiga a los cultivadores de cannabis con penas que van de cuatro a 15 años de prisión, casi el mismo tiempo que un homicidio simple.
“Hoy ya sabemos que la mayor parte de los consumidores, un 75 por ciento, son personas que no tienen problemas consigo mismos o con su entorno respecto del uso de drogas. Hay un 20 por ciento de gente que abusa, y un cinco de adictos”, detalló Ascolani y añadió: “La persona que tiene problemas con el uso de sustancias tiene que tener acceso a la salud y siendo que el mismo está penalizado, se corta dicho acceso que es un derecho humano básico”.
“Estamos desperdiciando dinero público en reprimir ciudadanos y en realidad estamos vulnerando sus derechos humanos”, disparó y aclaró que el pedido es por la despenalizacion de la tenencia para consumo personal y del autocultivo. Precisamente, respecto de este último punto Ascolani explicitó la aspiración habilitar una canopea (superficie cultivabe de cannabis) de ocho metros cuadrados. Teniendo en cuenta que las plantas pueden variar de 15 centímetrosa dos metros de altura, ello permitiría una cosecha de 1,400 kilos, suficiente para el consumo personal de todo un año.
“Pedimos 1.400 kilos de acopio y un jardin personal de como máximo ocho metro cuadrados. Otro pedido muy importante es el de los clubes de cultivo: personas adutas, mayores, cultivadores de cannabis que se reunan para cultivar en conjunto, sin fines de lucro, se reparten los gastos y la cosecha” precisó el representate de la AREC, quien aseguró también que desde el sitio web de la Asociación se puede acceder a un documento que plantea cómo debería fiscalizarse el autocultivo.
Y es que Ascolani apunta a la figura del cultivo como una de las mayores carencias que presentan los distintos proyectos respecto de la legalización, incluído el propuesto por el senador nacional Aníbal Fernández: “Se despenaliza la tenencia para consumo personal pero no se aclara qué es la tenencia personal. De esa manera, las personas que cultivan cannabis para su propio consumo terminan en la inseguridad juridica. No saben si los van a allanar o no por eso”.
“Nosotros hacemos un apoyo crítico del proyecto de Aníbal Fernández porque es un proyecto elaborado por un comité científico que conformó él hace cinco años con personas muy capacitadas y que realmente resuelve una serie de falencias y discrecionalidades reflejadas en la Ley 23.737 que vulneran la Constitución Nacional y la Declaración Universal de Derechos Humanos”, concluyó.
