“Jornada de protesta con paros y movilizaciones hacia la Plaza de Mayo”, anunció para el próximo miércoles Juan Carlos Schmid, integrante de la conducción de la CGT liderada por Hugo Moyano, que al mismo tiempo admitió que “no todos” los sindicatos de la central obrera van a participar de la medida.
“Es un paro de la CGT”, tuvo que decir Schmid ante las repreguntas de periodistas que asistieron a la conferencia de prensa que dirigentes de la CGT –sin la presencia de Moyano- brindaron al caer la tarde de este jueves.
Pero el propio Schmid había señalado en su primera intervención ante los medios que hasta el momento el único gremio que resolvió paralizar sus actividades durante las 24 horas del miércoles próximo es Camioneros, mientras que el resto irá definiendo su propia modalidad apuntando fundamentalmente a garantizar la presencia de manifestantes en la Plaza de Mayo.
El titular de Dragado y Balizamiento y también de la Catt –la confederación de sindicatos del transporte- dijo además que, con la actual situación interna de la central obrera como marco, “no todos” los gremios cegetistas van a sumarse, aunque sí garantizó la adhesión de “más de 50” organizaciones sindicales entre las que destacó a “bancarios y petroleros”.
A la hora de explicar las razones de la protesta Schmid arrancó con la mención de los reclamos de suba del mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias y la eliminación de los topes para el cobro de asignaciones familiares, y luego sumó el pedido se aumento de los montos en concepto de ayuda escolar que perciben los trabajadores y “fundamentalmente la tendencia a criminalizar la protesta social por parte del gobierno” a partir de las denuncias penales presentadas contra Moyano en el marco del conflicto por los bloqueos a las destilerías.
“No podemos dejar pasar por alto los comentarios de funcionarios nacionales de que la protesta tiene que ver con una actitud golpista. Rechazamos esta terminología que es irresponsable por parte de los funcionarios del gobierno. Lo que llevamos adelante son protestas y medidas enmarcadas en la Constitución”, remarcó, al tiempo que sostuvo que “la CGT ha demostrado prudencia y una larga espera de respuesta del Ejecutivo” a los reclamos respecto de Ganancias y asignaciones familiares, “que fueron planteados en setiembre del año pasado”, recordó.
“Son cuestiones que tienen que ver con el costado fiscal y tienen que ser resueltas por el Poder Ejecutivo nacional, que ha congelado el diálogo desde setiembre del año pasado”, añadió Schmid, aunque minutos después Omar Plaini, titular del gremio de Canillitas y diputado nacional, anunció también que los legisladores que responden a la central obrera están trabajando en proyectos de ley respecto de las dos reivindicaciones.
“Yo siempre digo que hasta en la guerra se tienden puentes de diálogo”, dijo Schmid en otro tramo de la conferencia de prensa. “Encauzar el diálogo social es responsabilidad primaria del gobierno”, había señalado minutos antes.
“Tenemos claro que no hay que desfinanciar el Estado, pero la pregunta es si solo los trabajadores tenemos que contribuir”, fue otra de las frases del dirigente cegetista, que sobre el final de la charla con la prensa insistió en mostrar disposición a buscar caminos de acercamiento: “Si llama la presidenta a una reunión vamos a ir al diálogo porque es lo que estamos reclamando”, expresó, aunque sin poner ese eventual encuentro como condición indispensable: “Lo importante es que se manifieste cuál es el momento, la fecha de la corrección” en Ganancias y asignaciones, que aparece como el gesto que los dirigentes más cercanos a Moyano están pidiendo a la Casa Rosada para intentar aquietar las aguas cuya turbulencia puso en jaque el abastecimiento de combustibles en todo el país.
