El búnker de drogas situado a metros de una comisaría de barrio Las Flores y que fue allanado el sábado último por la policía bonaerense en un operativo que causó la indignación del ministro de Seguridad santafesino Raúl Lamberto, se convirtió este jueves en núcleo del debate sobre la situación de las fuerzas de seguridad de la provincia. La “inoperancia aparente” policial supuesta por el fiscal de San Nicolás que ordenó el allanamiento, será ahora investigada por un fiscal rosarino.
El sábado pasado, el fiscal general de San Nicolás, Héctor Tanús, ordenó el allanamiento de un kiosco de drogas en un barrio rosarino, acción que fue llevada a cabo con respaldo del grupo Halcón de la policía bonaerense, sin dar participación ni aviso a fuerzas locales. Esto causó la indignación del ministro de Seguridad santafesino, Raúl Lamberto, quien calificó el operativo como una “intromisión en el territorio de la provincia de Santa Fe que tuvo más riesgos que resultados”.
«No se justifica que irrumpan como Swat en un lugar que ni conocen», dijo Lamberto a la prensa.
El ministro explicó que el mismo búnker de barrio Las Flores donde la bonaerense encontró 12 kilos de cocaína, fue allanado por la policía santafesina hace tres meses con mejores resultados. En esa ocasión, contó Lamberto, además de incautar “drogas, armas y dinero, se arrestó a nueve personas que hoy están bajo proceso judicial”.
En este caso, señaló el funcionario, “al margen de la eventual recuperación de un lote de droga, no hubo detenidos, no hallaron armas ni dinero. Incluso reconocieron que no conocían la complejidad del lugar donde entraron”.
Pero el malestar de Lamberto no pasa por el escaso botín de la redada, sino por las declaraciones de Tanús, quien puso en graves cuestionamientos las cualidades de las fuerzas de seguridad locales. Según consigna un artículo sobre el tema publicado este jueves en el diario La Capital el fiscal nicoleño dijo que no correspondía avisarle al gobierno santafesino del operativo, que no se pidió colaboración de la policía rosarina por el temor al fracaso de la operación, y que era alevoso que se vendiera droga a tal escala a pocas cuadras de una comisaría.
Esto fue interpretado por el ministro como un desmerecimiento hacia la policía santafesina: “El fiscal Tanús parece decir somos los buenos y la policía en Santa Fe es mala. Tendríamos que empezar a discutir cómo es la policía en cada lugar”, dijo Lamberto a La Capital.
Más allá de la defensa dolida que hizo el ministro de la fuerza que ahora tiene a su cargo, el hecho es que las palabras de Tanús también llegaron a oídos de los Tribunales de Rosario y el fiscal de Cámaras Guillermo Camprini afirmó este mismo jueves haber ordenado el inicio de una investigación penal para determinar la “inoperancia aparente de la policía santafesina”.
En declaraciones a LT8, Camporini sostuvo que “a mí, como funcionario judicial, me sorprendió que haya venido personal del Grupo Halcón de la policía bonaerense, con órdenes de allanamientos emanadas por la Justicia Federal de Rosario, y las declaraciones del fiscal general de San Nicolás sobre la inoperancia aparente de la policía santafesina que no tenía conocimiento de la existencia de ese quiosco cuando había un movimiento inusual de gente, la cantidad de drogas que se halló y la cercanía con la seccional policial”.
“Ayer (por este miércoles), viajé a San Nicolás para entrevistarme con el fiscal y solicitado informes que los cedió de inmediato. Yo creo que esto amerita, para tranquilidad de todos o preocupación de algunos, que se inicie una investigación penal por incumplimiento de los deberes de funcionario policial», agregó el fiscal.
Camporini se refirió además al allanamiento realizado antes que el del sábado pasado y sobre cuyo resultado alardeó Lamberto: «Ese lugar fue allanado en marzo por la policía santafesina, pero no por drogas. Se hizo el procedimiento por otra causa y en el marco de esa inspección se halló droga, pero en cantidad mínima, unos quinientos gramos de marihuana y un poco menos de cocaína. Después de eso, en ese lugar se volvió a vender drogas. Y resulta que ahora encontraron doce kilos de cocaína», señaló.
