El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, anunció que la cartera a su cargo dictaminó la anulación del llamado a elecciones de autoridades en la Confederación General del Trabajo (CGT) y sostuvo que los propios sindicatos deberán «normalizar el proceso electoral».
Carlos Tomada sostuvo en una conferencia de prensa realizada en el ministerio este viernes que en el Consejo Directivo de la central obrera del pasado 24 de abril «no se cumplieron los requisitos» para alcanzar el quórum necesario en el acto administrativo que programa el desarrollo de elecciones.
«No estuvieron dadas las condiciones para que se desarrollen las elecciones de la CGT y, ante la impugnación de distintas organizaciones, actuamos como en cualquier proceso en que una parte impugna», dijo el Ministro, tras lo cual informó que los sindicalistas «ya fueron notificados».
A su vez, el titular de la cartera laboral defendió la intervención del gobierno nacional en el proceso electoral de la central obrera, porque «surge de la Ley y la jurisprudencia».
«La reunión del Consejo Directivo del 24 de abril no tuvo el quórum necesario, porque 6 miembros fueron reemplazados de manera irregular», señaló el funcionario durante la rueda de prensa en la que dio a conocer el dictamen de la cartera respecto a la situación planteada en la central obrera.
A la vez, Tomada señaló que el propio estatuto de la CGT especifica que los cargos en el Consejo Directivo son personales y que no pueden votar en el mismo representantes de quienes ostentan el cargo.
El Consejo Directivo de la CGT está integrado por 35 miembros, de los cuales estuvieron presentes 15, mientras que el quórum para sesionar es de 17, según se desprende del expediente del Ministerio.
El escrito también señaló que hubo «seis personas que suscribieron la planilla de asistencia al consejo en representación de los delegados», lo cual «surge de las constancias de ambas partes», indicó el ministro.
Esas personas pertenecen tanto al sector que lidera el actual secretario general de la CGT, Hugo Moyano, como al representado por «los gordos» (Oscar Lescano, Armando Cavalieri y Carlos West Ocampo), que se opone a la reelección del dirigente camionero.
Específicamente, se trata de Sergio Omar Palazzo en lugar de Juan José Zanola; Guillermo D`Angella por José Pedraza; José Listo por Jorge Lobais; Ernesto Ayala por Gerónimo Venegas; Omar Sans por Ramón Baldassini y Miguel Soto por Omar Viviani.
En cuanto al futuro de la principal central obrera del país, Tomada señaló que hasta que la CGT establezca el nuevo calendario a elecciones, la central mantendrá a las mismas autoridades.
El martes, ambos sectores se reunieron en audiencia en el Ministerio de Trabajo para acercar partes, cuestión que no fue lograda.
Tras ese encuentro, el moyanismo ratificó que las elecciones del 12 de julio, en las que Moyano espera ser reelecto, serán llevadas adelante.
«La posibilidad del diálogo está abierta. Las alternativas son diversas y (la solución al conflicto en la CGT) está en sus manos», sostuvo Tomada, quien aseguró que la decisión de su cartera «respeta la ley y la autonomía sindical».
En tanto, Tomada, quien dialogó con la prensa junto al jefe de Gabinete ministerial, Norberto Ciaravino, resaltó que «está muy clara la posición del Gobierno, y es la de que el movimiento obrero esté unido».
