El ginecólogo Julio Luis Alberto Sacher, cuyo nombre figura en la partida de nacimiento apócrifa que inscribió al nieto de Estela de Carlotto, es repudiado por la mayoría de los vecinos de Olavarría.
“Repudio a un ginecólogo olavarriense” publicó en su tapa el diario de la ciudad, El Popular. Sacher ahora es visto de otra manera por los vecinos, de hecho desde que apareció Guido las ventanas de su consultorio, ubicado sobre la artería General Paz al 3200, permanecen cerradas.
A la vez, es repudiado por sus pares de profesión, la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la provincia de Buenos Aires (Cicop) hizo lo propio. La decisión surgió como parte de la resolución del Congreso gremial, y fue votado por unanimidad por más de cincuenta delegados de la asociación.
El presidente del Cicop, Fernando Corsiglia, afirmó: “Lo repudiamos por su intervención, claramente definida, en la entrega o el inicio de la entrega de quien hoy es conocido como Ignacio Guido Montoya Carlotto”.
Corsiglia explicó que decidieron marcar el repudio, pero no avanzar en un reclamo al Colegio Médico para que se le retire la matrícula a Sacher por entender que la entidad “ha tenido ya intervenciones no muy felices en otros casos”, explicó. “Desconocemos al colegio como parte importante en definiciones de este tipo”, subrayó Corsiglia.
Sacher, como médico matriculado depende del Colegio Médico Distrito VIII, al que pertenece Olavarría, donde institucionalmente, no se abordó el tema aún.
Por su parte, el diario Popular dice que “extraoficialmente se pudo conocer que la máxima medida que podría aplicarse según el Código de Ética (elaborado en 1958) es la ‘suspensión en el ejercicio profesional hasta el término de seis meses’. Así lo establece el artículo 52, inciso c, mientras que la ‘cancelación de la matrícula’ sólo es posible ‘cuando se hubiera aplicado más de tres veces la suspensión de seis meses’. Inclusive en los casos en que un médico sea condenado por delitos como tormentos”.
En tanto, el miércoles de la semana pasada, el abogado de Julio Sacher se presentó ante la jueza María Romilda Servini de Cubría para ponerse a disposición de la Justicia. Si bien aún no se lo llamó a indagatoria ni se le dictó el procesamiento, se le prohibió salir del país.
Sacher trabajó en la policía de la provincia de Buenos Aires desde 1966 hasta 1997 y figura como el médico que constató el nacimiento del hijo de Laura Carlotto el 28 de junio de 1978 en la casa del presunto entregador del bebé, Carlos Francisco “Pancho” Aguilar. Sin embargo, el certificado de constatación de parto, donde –de existir– debería figurar la firma del médico fue arrastrado por el agua en la brutal inundación que sufrió en 1980 Olavarría y Azul.
Las fuentes del juzgado a cargo de la causa por la apropiación afirmaron que se pidió la partida “el primer día que se conoció la aparición” del joven, y como no tuvieron respuesta, se giró un oficio al juzgado federal de Azul que subroga Martín Bava, para que enviaran una comisión a la dependencia, a fin de diligenciar personalmente la documentación. Así se enteraron de que el certificado médico no existía.
Sacher y todas las personas que figuran en la partida de nacimiento, están formalmente imputadas y deberían ser llamadas a declaración indagatoria, dicen desde el juzgado. Pero cualquier medida de ese tenor será después de esta semana, plazo procesal en el que la querella de Abuelas de Plaza de Mayo y la Fiscalía de Carlos Stornelli deberán pedir las medidas que crean importantes. Entonces Servini definirá el rumbo a tomar.
Por ahora, aseguran desde su despacho, no les llegó ningún pedido formal para que la tramitación del expediente se mude a La Plata, donde su par Manuel Blanco, investiga el cautiverio y asesinato de Laura Carlotto, la madre de Ignacio Guido.
Por ahora, el ginecólogo informó a sus pacientes que mantendrá cerrado el consultorio hasta el 8 de septiembre.
Fuente: Infojus