Central volvió a dejar más dudas que certezas en su juego y cayó 1 a 0 como local con Atlético Rafaela, en la continuidad de la 14ª fecha del torneo local. Vittor y Bastía convirtieron los goles del triunfo rafaelino.
Otro flojo papel dejó a Rosario Central con las manos vacías en la lluviosa noche en el Gigante de Arroyito. El equipo dirigido por Miguel Russo deberá levantar el nivel para soñar con la Copa Argentina.
El auriazul, que perdió cinco de los últimos seis cotejos, se quedó con 16 puntos; mientras que Rafaela, que cortó una racha de tres partidos sin victorias (dos empates y una caída), alcanzó las 22 unidades.
Rosario Central, con un 4-2-3-1, asumió el protagonismo desde el comienzo, atacó por las bandas y generó un par de situaciones de gol, la más clara un tiro en el travesaño de Fernando Barrientos, a los 2′, pero no las concretó.
El dueño de casa tuvo dinámica y destellos de fútbol con Hernán Encina, Pablo Becker y Jonás Aguirre, mientras que Sebastián Abreu fue un referente de área, pero pagó caro una distracción en defensa con el gol de cabeza de Sergio Vittor, a los 23′.
Rafaela, con un 4-3-3, creció futbolísticamente tras la apertura del marcador, emparejó el desarrollo del juego y después marcó el ritmo del partido con la frescura de Diego Montiel y el despliegue de Adrián Bastía, Walter Serrano y Germán Rodríguez Rojas en la mitad de la cancha.
Si bien es cierto que el conjunto de Roberto Sensini careció de profundidad para ampliar la ventaja, también lo es que no sufrió en defensa.
Central sumó gente en ataque en el segundo tiempo con el colombiano José Valencia y Walter Montoya, pero le costó generar situaciones de gol frente a la disciplina táctica y la solidez defensiva de su rival.
Es que con el transcurrir de los minutos, la impaciencia se convirtió en el peor enemigo de los de Arroyito y a partir de eso, la Crema ganó en tranquilidad.
El conjunto rafaelino, de hecho, tuvo las chances más claras, como una de Federico González que resolvió el arquero Mauricio Caranta, a los 27′.
Así, entre la desesperación y la falta de ideas de Central y la tranquilidad y buen criterio de Rafaela se consumió el partido y en la última jugada el polaco Bastía marcó el 2-0 final.
Fuente: Télam.
