El ministro del Interior Rogelio Frigerio, casi blanqueando que Mauricio Macri está dispuesto a todo, adelantó que el gobierno va a «intentar convencer por todos los medios de que la ley antidespidos es mala» a la oposición y los distintos sectores políticos . Los primeros en probar esa medicina serán los gobernadores, el próximo miércoles.
El presidente Macri estaría dispuesto a «dialogar y negociar» pero con «mucha firmeza en sus convicciones», afirmó Frigerio, quien consideró que la ley antidespidos «va en contra del objetivo que pretende generar puestos de trabajo de calidad».
El ministro del Interior, en declaraciones a radio Mitre, anticipó: “Hasta el miércoles de la sesión vamos a intentar por todos los medios convencer -no tenemos otra porque somos minoría en ambas cámaras- de que es una ley mala y que va en contra del objetivo que pretende generar puestos de trabajo de calidad».
Lo cierto es que Frigerio reunirá el miércoles en la provincia de Córdoba a todos los gobernadores provinciales, el mismo día en que la Cámara de Diputados tratará la ley de emergencia ocupacional, que ya cuenta con media sanción del Senado, y que busca prohibir los despidos y reinstaurar la doble indemnización.
El funcionario reconoció que la mora en el tratamiento de la ley le vino bien al gobierno macrista: “Que se haya postergado la decisión nos da tiempo para seguir intentando convencer a todos los sectores políticos de que la ley de doble indemnización es mala”.
En ese sentido, el ministro sugirió los alcances del diálogo, al afirmar que el presidente Macri “está dispuesto a negociar con mucha firmeza en sus convicciones” y “lo que él considera mal lo va a plantear con todas las letras, no para quedar bien ni tener actitudes demagógicas sino para modificar la realidad, que para eso lo votaron”.
Frigerio sostuvo que algunos sectores impulsan la ley “con un buen motivo”, pero advirtió que “muchos otros quieren que al Presidente le vaya mal, como lo plantean de manera explícita, quieren poner palos en la rueda, y entienden que cuánto peor, mejor para ellos”.
“No estamos dispuestos a acompañar algo que consideramos malo para le gente y el empleo. En estos tres días que tenemos por delante vamos a tratar de convencer a todos los sectores para llegar a una ley buena que genere un clima de confianza para que vengan inversiones y se creen empleos de calidad”, insistió.
