Foto: Infobae
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El coro de rechazos a la reforma macrista del Ministerio Público Fiscal (MPF) no se detuvo. Al FpV y la reculada del massismo se sumaron Carrió y Stolbizer, y hasta el ministro Garavano pisó el freno.

El oficialismo de la Cámara de Diputados resolvió postergar el debate del proyecto, que iba a ser tratado este miércoles en una sesión especial, tras los cuestionamientos planteados por casi toda la oposición, pero en particular por una socia del macrismo, la diputada de la Coalición Cívica (CC) Elisa Carrió. Tamaños rechazos hicieron peligrar los acuerdos que se habían construido para aprobar el proyecto sobre, todo con el Frente Renovador (FR).

La movida del gobierno de Mauricio Macri apunta a dos blancos a la vez: deshacerse de la Procuradora General Alejandra Gils Carbó y hacer desaparecer, crear y/o colonizar las Fiscalías que integran el Ministerio Público. En el primer caso, entre otras cosas, la duración de los mandatos en la Procuraduría General de la Nación.

La diputada kirchnerista Diana Conti, entre otros, ya había sido clara a la hora de cuestionar el proyecto macrista: “El dictamen violó dos principios constitucionales íntimamente relacionados: la división de poderes y la autonomía del Ministerio Público Fiscal”, sostuvo. Y agregó que “la sujeción del MPF a otros poderes se da fundamentalmente a través de la injerencia de la comisión bicameral” y que el “Ejecutivo también se inmiscuye en la gestión del MPF”

A las iniciales críticas del Frente para la Victoria (FpV) y el Frente de Izquierda (FIT), a las que adhirieron el espacio Justicia Legítima y una buena parte de la “familia judicial”, se sumó el FR, y las diputadas Carrió, de la CC, y Margarita Stolbizer del GEN.

Como casi siempre que el macrismo la desplaza para negociar con el jefe del FR Sergio Massa, Carrió les escupió el asado a sus socios del PRO. Lilita se mostró contraria al contenido de la iniciativa de reforma de la ley de Ministerio Público por considerarla “inconstitucional”, y provocó una fisura entre los propios integrantes del interbloque Cambiemos, que se reunieron el martes al mediodía y acordaron postergar el debate previsto para este miércoles y sesionar, en cambio, con otros temas pendientes.
Carrió se excedió tanto que hasta Massa se asustó. El palo en la rueda de Lilita generó malestar en el FR, que advirtió que no continuarán con el tratamiento de la iniciativa en el recinto «hasta que Cambiemos no resuelva sus diferencias» internas en torno al proyecto que acota el mandato del titular de la Procuración a cinco años, renovables por cinco más, y crea una comisión bicameral para seguir su funcionamiento.

Carrió llegó a anunciar que presentará una iniciativa para llevar a juicio político a Gils Carbó. Lo hizo acompañada por diputados del PRO y la UCR, fuerza que parece siempre lista para todo mandado.

La opinión de los fiscales

Mientras tanto, unos 40 fiscales se preparaban para asistir a la sesión con el objetivo de manifestar su oposición al proyecto de ley. Así lo había adelantado la fiscal general Mónica Cuñarro en declaraciones a Radio del Plata, en las que precisó que «más de 40 fiscales, junto a varios colectivos, entre los que también hay algunas agrupaciones sindicales, vamos a ir, tranquilos, mañana al recinto con carteles con consignas».

Para Cuñarro, «el objetivo (de la reforma) es cambiar figuritas de fiscales e intervenir de facto el Ministerio Público».

Libres del Sur se opone

“Este proyecto mantiene una justicia a la medida del oficialismo”. Así se pronunció la bancada de Libres del Sur que conduce Victoria Donda. “El proyecto de modificación del MPF no puede prosperar. No solo porque resulta inconstitucional en tanto afecta la división de poderes y la independencia del Ministerio Público Fiscal, sino porque además, en caso de aprobarse, generaría una fabulosa confusión y masiva acefalía en las principales Procuradurías y Unidades Fiscales Especializadas”, agregaron.

Stolbizer «coincide» con el rechazo de Carrió

La diputada nacional del GEN afirmó que «lo peor del macrismo es cuando hace kirchnerismo», añadió que en el Gobierno «tenían redactado un DNU para desplazar a Gils Carbó» y advirtió que eso «hubiera sido un error».
Stolbizer amplió: «Coincido con Carrió, he presentado más de un pedido de juicio político contra Gils Carbó, pero lo peor del macrismo es cuando hace kirchnerismo. Lo ha hecho varias veces, y le ha salido mal cuando lo intenta, como cuando intentó designar por decreto a jueces de la Corte o el aumento de tarifas sin audiencia pública», afirmó Margarita Stolbizer en declaraciones en América TV.

Asimismo, la líder del GEN añadió que en el Gobierno «tenían redactado un DNU para desplazar a Gils Carbó» y advirtió que eso «hubiera sido un error». No una aberración inconstitucional. Un “error”.

En ese marco, la diputada nacional subrayó que «este es un gobierno que llegó con una propuesta de cambio y tiene que demostrar que se va a bancar la legalidad».

Garavano en chancletas y retrocediendo a toda carrera

Sin el apoyo del massismo, el oficialista interbloque Cambiemos no reúne el consenso necesario para poder convocar a la sesión y ya anticiparon que no se arriesgarán a seguir adelante sin un panorama más certero. Desde el FR reniegan de «tener que aparecer acompañando la sanción de una ley, que integrantes del propio oficialismo están cuestionando».
Con ese horizonte tormentoso, el ministro de Justicia Germán Garavano, que se había ufanado una vez más de solicitar “un paso al costado” de Gils Carbó, fue visto este martes recalculando su apuesta y apelando a frases más conciliadoras: “Si no se generan los consensos, no habrá modificación a la ley”.

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