Todo confluyó: la tarde espléndida y la levantada del Canaya, que venía de cuatro triunfos consecutivos, la víspera el Día del Trabajador y la cercanía del clásico. Una sumatoria óptima para que se desate un domingo de fiesta total en Arroyito.
Una multitud acompañó este domingo a Central que viene dando pasos cada vez más firmes para meterse en las copas. Los cánticos dedicados especialmente a sus eternos rivales comenzaron desde temprano y fueron música de fondo, durante toda la tarde.
Antes del partido un grupo de mujeres del club salió al césped con una bandera con la consigna “Ni una menos” que cosechó los aplausos a su paso. La sensibilidad sigue a flor de piel por los últimos casos de femicidios.
Otro momento emotivo fue cuando se hizo un minuto de silencio por la muerte del padre del jugador centralista Gustavo Colman que fue homenajeado desde los cuatro costados de la cancha.
La gran explosión del Gigante llegó cuando por fin el chaqueño Germán Herrera –otra vez como con Gimnasia la semana pasada–, la clavó al promediar el segundo tiempo. Tomó de lleno un rebote después de un córner y la mandó al fondo del arco.
Los marplatenses fueron a buscarlo pero se encontraron con otro mazazo, luego de una contra muy rápida con una corrida del pibe Maximiliano Lovera sobre la derecha, quien luego envió al área una bocha que Teo dejo pasar para Fabián Bordagaray, quien no falló e infló la red.
El partido estaba liquidado y la gente se dedicó a festejar enloquecida y darle aviso a los ñulistas: el clásico que se jugará en el parque y solo faltan dos fechas. Antes Central viajará al Nuevo Gasómetro a enfrentar a San Lorenzo.
El telón se aprestaba a cerrarse y las luces de celulares y las bengalas iluminaban la noche azul estremecida por otro triunfazo que se paladeó como un buen plato de locro.
Mientras la euforia ganaba las calles de Arroyito –lleva siete partidos sin perder, con seis triunfos y un empate– el propio Paolo Montero trataba de mantener la calma ante los periodistas: «Uno siempre es optimista y busca lo mejor. No esperábamos conseguir todos estos puntos, pero hay que seguir trabajando», consideró. Sobre el clásico, que será el primero suyo con técnico, contó que sabe lo que significa. “Me lo han contado”, dijo.
