El pre candidato a concejal, Fernando Rosúa, aseguró que la creación de una policía local “es factible en el corto plazo”, y que “sólo depende de la voluntad política” de la intendenta y el gobernador.

El Chino Rosúa sostuvo que la creación de una policía municipal “sólo depende de la voluntad política de Fein y de Lifschitz” en la medida que “no hace falta ni esperar una reforma constitucional, ni una Ley provincial”, ya que “alcanza con la delegación concertada de competencias y de recursos desde la provincia al municipio”.

“Proponemos una reforma integral de las fuerzas de seguridad, con un nuevo esquema organizativo para la policía, en el que el Intendente de Rosario sea la conducción civil de la fuerza, y que cuente con un comisario por barrio, a cargo de una responsabilidad bien delimitada en términos territoriales”, señaló el pre candidato por el Frente Justicialista.

En este sentido, remarcó que “hoy tenemos una policía conducida a 160 kilómetros de distancia, y en la que la superposición de áreas y funciones desdibuja las responsabilidades sobre determinada zona en materia preventiva”. Y agregó: “Cada vecino, cada institución comunitaria, tiene derecho a saber el nombre y apellido de la persona encargada de la seguridad pública en su barrio, y a tener una relación de cercanía, que le permita ejercer un control ciudadano de la gestión”.

El ex edil peronista planteó además que, en ese marco, debería trabajarse junto al Ministerio Público de la Acusación “la posibilidad de reforzar este concepto, más anclado en lo territorial, con el funcionamiento de una fiscalía a cargo de cada una de las actuales seccionales, que concentre investigaciones criminales de hechos delictivos perpetrados exclusivamente en esa jurisdicción”, y amplió: “En base a los turnos de guardia, o a las especialidades propias de cada unidad fiscal, muchas veces se terminan investigando por separado delitos cometidos a una cuadra de distancia, cuyos responsables posiblemente tengan algún tipo de relación”.

Por último, Rosúa señaló que “el Concejo Municipal debe ser el ámbito en el que se gesten los acuerdos para poder llevar adelante estas reformas, y se le dé forma institucional a la decisión de involucrar al Estado local en la seguridad pública”, y cerró: “No vemos que hoy la Intendenta exprese esa decisión, en su gestión anterior –y frente a la evidente crisis en materia de seguridad– le solicitó al entonces gobernador Bonfatti la creación de una policía municipal, pero luego de asumido Lifschitz dejó de reclamarlo”.

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