Desde hace mucho señalo que es preciso admitir una dosis central de realidad objetiva en el periodismo. La referencia directa al hecho debe ser la matriz del trabajo.

Es claro que hay, a partir de allí, zonas de interpretación: posicionamiento social y regional –hacemos hincapié en ello–, prisma –lente a través del cual se observa–, formación del colega y también línea editorial del medio. Pero el hecho merece respeto, y no me refiero a situaciones confusas, investigables, sino a elementos comprobables de modo inequívoco.

Se me responde habitualmente que todo es subjetivo, que el periodismo siempre es subjetivo. Ese criterio queda bien, semeja libertad y hasta presunto cuestionamiento a la falsa neutralidad de la prensa hegemónica.Sin embargo, es una de las varas que fue originando este presente en el que Cualquier Cosa puede decirse como si en verdad ocurriera.

Contundente: Cambiemos perdió las elecciones. Como si los indicadores nacionales no fueran suficientes, las perdió en los dos distritos centrales: Buenos Aires y Santa Fe. Bien: los grandes medios afirman, desde hace 48 horas, que Cambiemos ganó las elecciones, sin un sólo elemento que fundamente el aserto. Y todos los análisis se desarrollan a partir de esa afirmación errónea.

En otros períodos, tan complejos como el presente pero con otra dimensión comunicacional, los medios coincidían en brindar adecuadamente el resultado de las elecciones. Luego, a modo interpretativo, llegaba la lectura según el lineamiento propio: se cuestionaba o se celebraba la decisión de la ciudadanía.

Por estas horas, algo inédito en nuestra historia, se dice simplemente que ganó el que perdió. Los futboleros sabemos que una cosa es ganar, y otra perder. Después se puede interpretar si se jugó bien o mal, si se marcó con precisión, si el árbitro influyó. Pero hay un resultado, y se admite el mismo como hecho sencillo y directo.

No me animo a ahondar por ahora en las consecuencias psicológico sociales de esta situación extendida sobre la opinión pública. Es preciso pensar seriamente lo que estamos viviendo.

*Director de La Señal Medios.

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