Según el Instituto Nacional de Estadística y Censo (Indec), el 80 por ciento de los asalariados no cubre la canasta básica, la mitad de los trabajadores gana hasta 10 mil pesos por mes y empeoró la distribución del ingreso.

La política económica del macrismo muestra su peor rostro. Los rebotes en algunos sectores de la actividad económica contra el derrumbe del año pasado no se reflejan en un mejor bienestar para el grueso de la población. Según datos del Indec, más de la mitad de los hogares y el 80 por ciento de los asalariados se encuentran en situación de pobreza, al no cubrir con sus ingresos el costo de la canasta básica.

Las últimas cifras difundidas por el organismo oficial correspondientes al segundo trimestre del año en comparación con igual período de 2016 marcan que los hogares hasta el quinto decil (cada decil agrupa al 10 por ciento de la muestra) reúnen ingresos por 14.632 pesos, mientras que entre los asalariados apenas superan los 15.000 pesos los ubicados en el octavo decil, frente a una canasta básica de 15.244 pesos.

Más del 20 por ciento de los hogares tiene con un promedio de 4689 pesos por lo que se encuentra en situación de indigencia, cuya canasta Básica Alimentaria se encuentra en 6.247 pesos. Los hogares más pobres tienen ingresos que van de los 200 a los 6.700 pesos, con un ingreso promedio de 4.789 pesos.

En tanto, los hogares más ricos presentan ingresos que van desde los 45.000 a los 506.700 pesos, con un ingreso promedio es de 66.742 pesos por hogar.

Si se toma en cuenta el ingreso individual del trabajador surge que la mitad de ellos percibe ingresos por debajo de los 10.000 pesos por mes. Así,  los ingresos del 10 por ciento de la población más adinerada resultó 17 veces mayor que el que percibió el 10 por ciento más pobre, lo que implicó un crecimiento en la desigualdad, debido a que un año atrás la relación era de 16 veces mayor.

El Indec informó que el 10 por ciento de la población de mayores ingresos percibe entre 25.000 y 500.000 pesos mensuales, mientras que el decil inferior obtiene entre 70 y 3.000 pesos en igual período.

En este sentido, durante el segundo trimestre del año, el coeficiente de Gini (un indicador que cuanto más cercano a 1 sea el valor mayor es la desigualdad en el reparto de la torta) mostró una leve suba: fue de 0,428 puntos, frente al 0,427 de igual período del año pasado.

De todos modos, la distribución regresiva de los ingresos se acentúa al cotejar los valores registrados por el Indec antes de la llegada de Cambiemos a la Casa Rosada, ya que entre abril y junio de 2015 el guarismo llegaba a 0,410.

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