Las promesas de inversiones derivadas de tarifazos en el servicio de gas domiciliario son parte del rosario de incumplimientos del macrismo. Neuquén, principal productora de gas, desaceleró su producción en un 63 por ciento.

Un estudio llevado adelante por el Observatorio de la Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo (Oetec), ponderó que entre enero y agosto de 2017 la desaceleración en la producción de gas es del orden del 63 por ciento con relación al año pasado. El gobierno de Mauricio Macri cobra más caro el gas pero las empresas no reinvierten para producir más, como se prometió.

El trabajo plantea que “con los nuevos cuadros tarifarios, las productoras se embolsan más del 60 por ciento del valor de la factura del servicio de gas por redes”. Y pese a que una de las excusas puestas por el ministro de Energía Juan José Aranguren fue que con ese tarifazo aumentarían las inversiones, lo cierto es que las mismas “a nivel provincia (de Neuquén) caerán, de confirmarse lo informado por las empresas para este 2017, un 18 por ciento interanual en relación a 2015”.

El autor del análisis es Juan Francisco Fernández, quien recuerda que “la provincia de Neuquén es la primera productora de gas de la República Argentina. En 2016, representó el 48 por ciento del total extraído. Ese mismo año, registró una desaceleración de su tasa de producción, pasando de 7,5 por ciento a 7,2 por ciento”. Para 2017, el último análisis de Oetec para esa provincia llegó a cubrir el primer semestre, pero acaba de actualizarlo. Así, Fernández revela: “Hallamos entonces que la desaceleración en la tasa de producción se acentuaba: de 7,5 por ciento interanual en 2016 a 2,9 por ciento (una caída del 60 por ciento). En este trabajo avanzamos hasta el mes de agosto, es decir, cubrimos los primeros ocho meses de 2017”.

Fuente: Elaboración propia en base a datos del Ministerio de Energía.

El autor del estudio subrayó: “Como se aprecia del gráfico precedente, en los primeros ocho meses de 2017, la producción creció un 2,7 por ciento interanual. Al comparar este rendimiento con el de los años previos observamos una drástica desaceleración: de 8,4 por ciento en 2015 (mismo período), a 7,4 por ciento en 2016 y a 2,7 por ciento en el presente año. En pocas palabras, la caída en la tasa de producción es del orden del 63 por ciento”.

Cuando se comparan –según demuestra Oetec– las tasas de variación entre 2016 y 2017 (períodos enero en adelante a partir del primer trimestre), “se vislumbra en toda su magnitud el pésimo e inexplicable desempeño en lo que va del segundo mandato de administración Macri y del gobernador (neuquino) Omar Gutiérrez”:

Fuente: Elaboración propia en base a datos del Ministerio de Energía. La tasa de producción para los primeros siete meses del año fue del 2,7 por ciento, es decir, igual a la registrada para el período enero a agosto.

El estudio señala “la diferencia con las tasas de crecimiento del año pasado y del último gobierno kirchnerista (curvas verde y morada). En este sentido, la caída en la tasa de producción en relación a 2015 es del 67 por ciento. En segundo lugar, y específicamente sobre 2017, se advierte que a pesar del tarifazo del mes de abril la tasa de producción no para de caer”.

Conclusiones preocupantes

El estudio de Oetec desnuda que las acusaciones al anterior gobierno respecto del mal manejo de la matriz energética, y su consecuente perjuicio para la economía naciconal es una gran mentira.

“Analizar el desplome macrista de la producción gasífera neuquina pero abstrayéndose del tarifazo y del incremento exponencial de los precios del gas en boca de pozo resulta imperdonable (más que imposible)”, sentencia el autor del trabajo.

Fernández recuerda “la exposición del ministro de Energía de la provincia del Neuquén (Alejandro Nicola) en la audiencia pública del gas, en septiembre de 2016. Allí, el funcionario destacó las virtudes del Plan Gas lanzado a fines de 2012 y que permitió la recuperación de la producción provincial del mencionado hidrocarburo”. Debajo, la ilustración utilizada por Nicola en su presentación:

Fuente: Diapositiva expuesta por Alejandro Nicola en la audiencia pública de septiembre de 2016.

El especialista de Oetec recuerda que “al enseñar esta diapositiva, Nicola señaló: «El Plan Gas fue una señal de precios distinta, fue un incentivo a la producción; y rápidamente la industria reaccionó en forma positiva… La industria reaccionó rápidamente con una inversión que hizo que empezáramos a producir más, se revirtiera la tendencia negativa de la producción y pudiéramos pasar en promedio a producir un 12 por ciento más de energía. La curva naranja es la curva de producción de la provincia de Neuquén. A partir de 2013 es una proyección con el nivel de declinación que teníamos desde 2004. La celeste marca los valores reales que se dieron de producción…»”.

Fernández entonces se pregunta, por un lado: “¿Cómo se explica la impresionante desaceleración del orden del 63 por ciento en la tasa de producción a ocho meses de 2017 en relación al año pasado?” Y remite al primer gráfico.

Pero por otra parte, suma otros interrogantes: “¿Cómo se explica el pésimo desempeño en lo que va de 2017 (véase el segundo gráfico), luego de que el presidente de la Nación asegurara en enero del corriente inversiones multimillonarias para Vaca Muerta? ¿Dónde está ese dinero? ¿Dónde está el dinero del incremento del ajuste de abril?”.

Oetec, en el gráfico de abajo, ilustra la recuperación de la que hablaba Nicola, con datos del Ministerio de Energía:

Fuente: Elaboración propia en base a datos del Ministerio de Energía.

El autor, por último, plantea más preguntas: “¿Cómo fue que sin necesidad de tarifazo ni de flexibilización laboral ni de incremento exponencial en los precios del gas en boca de pozo se obtuvo la recuperación ilustrada entre 2013 y 2015?”.

Y remata: “¿Cómo se entiende que, a pesar de tarifazo, de la reducción de los costos laborales para las empresas (consecuencia de la flexibilización laboral) y de los precios del gas más caros del mundo, la tasa de producción haya caído (2016 en relación a 2015)?”.

La conclusión de Fernández es lapidaria: “Con los nuevos cuadros tarifarios, las productoras se embolsan más del 60 por ciento del valor de la factura del servicio de gas por redes (a través del incremento del precio del gas en el PIST). Lo acontecido en Neuquén impacta por supuesto a nivel país, permitiendo explicar la caída del 1,03 por ciento en la producción nacional entre enero y agosto de 2017 en relación a 2016.

Y es por lo anterior que formulamos la quinta y última pregunta: ¿Había que subir el precio del gas para estimular las inversiones (1) y, supuestamente, para mejorar una producción heredada en caída (que incluso demostramos que era mentira que estuviera cayendo)?”.

(1) Las inversiones totales a nivel provincia caerán, de confirmarse lo informado por las empresas para este 2017, un 18 por ciento interanual en relación a 2015. Por su parte, las inversiones en no convencionales, también para Neuquén, caerán un 6 por ciento entre iguales años (en convencionales el desplome es ya dramático: 45 por ciento en relación a 2016).

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