Las leyes que impulsa el gobierno nacional generan cada vez más rechazos. Ante el avance en comisiones del proyecto oficial de reforma previsional, la conducción de la CGT anunció que se suma la movilización convocada para este jueves y decretó un paro por 24 horas para el viernes. La jornada de este miércoles, en que se movilizaban los movimientos sociales, culminó con una violenta represión en la que fueron heridos al menos tres diputados nacionales.

Marcha y paro general

La CGT resolvió este miércoles realizar el viernes un paro general. Así lo anunció Juan Carlos Schmid, uno de los miembros del triunvirato de conducción de la CGT, que además precisó que el jueves se plegará a la jornada de movilización convocada por ambas CTA.

«Le están metiendo la mano en el bolsillo a los activos y a los jubilados. La reforma previsional la rechazamos de plano», fueron las palabras de Schmid tras una reunión de urgencia del Consejo Directivo de la CGT.

El dirigente sindical remarcó que la CGT sabe que «hay un acuerdo a nivel gobernaciones y en el Senado» pero advirtió que la central obrera «naturalmente no lo comparte».

La principal central obrera del país, se sumará a la marcha convocada por la CTA de los Trabajadores y la CTA Autónoma, las cuales resolvieron la tarde de este miércoles convocar a un cese de actividades y marchar al Congreso de la Nación para este jueves «en repudio» al proyecto de ley de reforma previsional.

«No vamos a aceptar ningún cálculo que atente contra el poder adquisitivo de las jubilaciones. Estamos terminantemente en contra de la reforma previsional», dijo Schmid. Y añadió: «La CGT mañana (por este jueves) estará acompañando y avalando las expresiones de organizaciones sociales y sindicales en el Congreso. Y el viernes haremos un paro general por 24 horas porque rechazamos que se sigan castigando a los sectores del trabajo y jubilados».

Las CTA también convocan

«La pretendida «reforma previsional» impulsada por el Gobierno no es más que una brutal ofensiva contra nuestros mayores a quienes busca arrancar más de 100.000 millones de pesos mediante una ley del Congreso de la Nación», advirtieron en un comunicado firmado por Pablo Micheli y Hugo Yasky.

Según informaron la concentración será a las 14 en la esquina de San José y Avenida de Mayo «para marchar pacíficamente a la sede del Congreso de la Nación».

La Confederación de los Trabajadores de la Educación (Ctera), integrante de la CTA de los Trabajadores y conducida por la santafesina Sonia Alesso, fue una de las primeras entidades sindicales en decretar el paro y llamar a la movilización.

Porotos

En la Casa Rosada hacen cuentas y dicen que ya cuentan con los 129 diputados necesarios para abrir la sesión de la Cámara baja y conseguir la aprobación que reclaman los organismos de crédito (FMI y Banco Mundial).

Represión en marcha

Este miércoles, miles de integrantes de organizaciones sociales, políticas y sindicales se manifestaron contra las reformas del Gobierno con un acto sobre la avenida 9 de Julio y luego trasladaron la protesta a las puertas del Congreso. La movilización culminó con una violenta represión de Gendarmería.

Los manifestantes, entre los que se encontraban diputados nacionales de espacios opositores, intentaron llegar a las inmediaciones del Parlamento, pero efectivos de Gendarmería les impidieron el paso con palos, balas de goma y camiones hidrantes.

Los diputados nacionales del Movimiento Evita Leonardo Grosso y Lucila De Ponti (santafesina) fueron algunos de los agredidos. Grosso recibió una mordida de un perro de la fuerza en el torso, la legisladora de Libres del Sur Victoria Donda denunció que la golpearon y el diputado Juan Manuel Huss, de La Cámpora, sufrió la fisura de una costilla.

La jornada, que tuvo su réplica en Rosario con cinco cortes de calle y una movilización a la sede local de Desarrollo Social de la Nación, comenzó con el corte de la avenida 9 de Julio pasadas las 14, cuando comenzaron a arribar al centro porteño las columnas de militantes de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), de la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y de Barrios de Pie, entre otros.

El escenario se colocó en la intersección de 9 de Julio y Avenida de Mayo, donde hablaron los dirigentes de las organizaciones y anunciaron la realización de una vigilia en el Congreso, donde este jueves se realizará una sesión especial para tratar la reforma previsional que impulsa el Gobierno, fuertemente custodiada por la oposición y los gremios.

Tras el acto, una parte de los manifestantes desconcentraron y otro grupo se movilizó hasta el Parlamento, donde fueron reprimidos.

Antes de formar un cordón con escudos sobre Rivadavia, a pocos metros de avenida Callao, los gendarmes golpearon y empujaron a diputados nacionales, entre los que se encontraban Grosso, Donda, Mayra Mendoza y Horacio Pietragalla (FpV).

«Me tiraron los perros y me dieron patadas», denunció Donda en declaraciones a la prensa tras el episodio, que también incluyó a los camiones hidrantes.

De la protesta también participaron miembros de la CTA de los Trabajadores, la CTA Autónoma, de ATE Nacional, de Suteba, Ctera, de la Asociación del Personal Superior de Empresas de Energía, del Frente Popular Darío Santillán y del Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), entre otros.

«Estamos yendo ahora al Congreso para que le vean la cara a los niños y viejos sobre los que pretenden hacer el ajuste Intentan hacer pasar estas reformas mediante el apriete. Una vergüenza», señaló el coordinador de Barrios de Pie, Daniel Menéndez, en su cuenta de Twitter, antes de la represión.


Fuentes: RR/NA/Página12/La Nación.

 

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