Van todos y todas. Las centrales sindicales de las distintas regiones de la provincia ratificaron su presencia en la movilización contra el ajuste, los despidos y la persecución sindical que impulsa el gobierno nacional. El 21 de febrero la avenida 9 de Julio recibirá las columnas que integran el Movimiento Obrero Santafesino (MOS), compuesto por las delegaciones de la CGT Venado Tuerto, San Lorenzo, Reconquista, Santa Fe y Esperanza; el Movimiento Sindical Rosarino, la CTA de los Trabajadores de Santa Fe, la UOM de Villa Constitución, la Festram, Amsafé Provincial y ATE Consejo Directivo Provincial. Otros gremios locales, que se ubican por fuera de esas estructuras, también anunciaron su participación.
Un pre congreso de la CTA de los Trabajadores realizado el jueves pasado en la capital provincial sirvió al MOS para ratificar el llamado a la movilización organizada por Camioneros, la Corriente Federal de los Trabajadores, las dos CTA y diferentes movimientos sociales como la Ctep, la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y Barrios de Pie.
En la Sala Mayor de ATE Casa España se dieron cita 818 congresales junto a Hugo Yasky, Jorge Hofman, Pedro Wasejko, Sonia Alesso y Roberto Baradel, más los referentes del MOS Pedro Bayúgar, Patricia Mounier y Guillermo Suárez de Sadop, Claudio Leoni y Carlos Borgna de Festram y Claudio Ghirardi de la CGT Santa Fe.
Allí, entre los primeros puntos acordados, se definió “ratificar la decisión de participar de la marcha del 21 de febrero contra la política de ajuste del gobierno de Mauricio Macri”. También se llamó a desarrollar un plan de lucha, que tendrá como próxima parada la movilización de la semana que viene, bajo las consignas “Por paritarias libres y sin techo”, “Basta de despidos”, “Contra la reforma laboral y previsional”, “Contra el impuesto al salario”, “Contra la criminalización de la protesta social”. Además, se decidió impulsar el Paro Internacional de Mujeres del 8 de marzo.
El MOS, que desde el año pasado viene dando pasos en la construcción de una instancia unitaria que reúne a delegaciones de la CGT y la CTA de la provincia, tuvo una activa participación en el encuentro preparatorio del 21F realizado la semana pasada en la sede de Camioneros. Según el titular de la Federación de Trabajadores Municipales (Festram), Claudio Leoni, quien estuvo en aquella reunión, en el ámbito de los sindicatos nacionales se observa con entusiasmo la experiencia de los gremios santafesinos.
Sobran los motivos
Los gremios de la provincia llegan a la marcha del 21 con numerosas razones para protestar. Ajustes, despidos, demora en el llamado a la discusión paritaria y el techo salarial que pretende imponer el gobierno de Mauricio Macri son algunos de los ejes que los empuja a marchar. A eso se suman las provocaciones lanzadas por funcionarios de Cambiemos, como el Ministro de Eduación de la Nación, Alejandro Finocchiaro, quien esta semana, en otro de los tantos ataques del gobierno a los sindicatos, dijo que “Ctera cada vez es más un partido político que un gremio”.
“El ensañamiento y las diatribas de barrabrava lo hacen quedar muy mal, por que uno espera que un ministro de Educación sea ejemplo y cuide los modales con los que se dirige a la gente», respondió con altura Sonia Alesso, titular de la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera) y del sindicato de los docentes provinciales (Amsafé).
Alesso consideró que “atacar a la Ctera es un obstáculo para cualquiera que quiera ajustar sobre el salario de los trabajadores”, sostuvo la docente. “Quiere que los gremios convalidemos el ajuste, pero sabe, porque ya se lo dijimos, que no vamos a renunciar a la paritaria nacional docente, ni dejar de pelear por los derechos de los trabajadores y por la educación pública”, dijo con relación a la movilización del 21 y la pelea salarial.
Esta semana, la dirigente de Amsafé también hizo reclamos a la provincia, de donde se espera la convocatoria para discutir paritarias y se fije la fecha del inicio de las negociaciones. Además, dejó en claro tanto hacia la Casa Rosada como a la Gris, que “los docentes no van a aceptar el techo del 15 por ciento que plantea el gobierno nacional”. “Es una condición que haya una mesa de discusión permanente y cláusula gatillo”, añadió Alesso.
Otros activos convocantes de la marcha del 21 son los trabajadores bancarios, que por estos días están en plena discusión paritaria. Su máximo dirigente nacional, Sergio Palazzo, es además el titular de la Corriente Federal de los Trabajadores, una de las vertientes más duras de la CGT.
Integrante de la mesa directiva nacional de La Bancaria, el referente rosarino Matías Layús fue el encargado de ratificar las medidas de fuerza para lunes 19 y martes 20, y la participación de su sindicato en la movilización del 21. «El paro de 48 horas es con quite de colaboración y asistencia a los lugares de trabajo», señaló el dirigente.
Los municipales de la Festram también se juegan una “semana clave”. En su último plenario de secretarios generales de la provincia dejaron en claro el “rechazo al 15 por ciento de aumento salarial”, que exigirán a su vez “la vigencia de la cláusula gatillo” y que movilizarán el 21 a la marcha nacional.
“Frente a las medidas que impulsa el Gobierno de Macri en materia salarial, apresurando acuerdos paritarios a la baja e impulsando una Reforma Laboral por Decreto, se decidió reclamar la derogación de la Reforma Previsional en solidaridad con los miles de trabajadores despedidos y en resistencia al ajuste”, planteó el documento final de los municipales.
En el texto se dejó también por escrito que “el plenario resolvió que los sindicatos procedan a organizarse para concurrir a la movilización convocada por el movimiento obrero el próximo 21 de febrero a la ciudad de Buenos Aires”.
Más gremios
Otros sindicatos de la ciudad y la región que salieron a convocar a la movilización del 21 fueron Recolectores, Dragado y Balizamiento, Obras Sanitarias y Asociación Junta Nacional de Granos, quienes brindaron una conferencia de prensa el viernes pasado, encabezada por Marcelo Andrada (Recolectores) y Edgardo Arrieta (Dragado y Balizamiento), dos referentes del moyanismo local.
También hizo lo propio el Sindicato Químico de San Lorenzo. Su secretario general, Julio Barroso aseguró que no marchan “por Moyano sino porque no se aguantan los tarifazos, que le saquen las retenciones a la soja pero mantengan ganancias a los salarios, los despidos industriales en el país, que se pague a los bonistas 22.5 por ciento anual y a los bancarios le ofrecen el 9 por ciento, y en contra de la persecución de las entidades sindicales». Para Barroso, «hay que movilizar contra el saqueo a los jubilados y el muro que quita a los jóvenes la posibilidad de entrar a un laburo».
Junto a los Químicos del cordón industrial se sumaron, entre otros gremios, los Ceramistas de Capitán Bermúdez, el Sindicato Obreros Empleados Petroquímicos Unidos (Soepu), los Aceiteros de San Lorenzo y los Papeleros.
Por último, del palo de los “independientes” que no adscriben a ninguna de las centrales sindicales, Daniel Yofra, secretario general de la Federación Nacional Aceitera –surgido del gremio rosarino del sector–, aseguró que acompañaran a la movilización. «Es necesario que los gremios se movilicen y si alguien hace punta estaremos ahí porque estamos en contra de toda la política que se viene aplicando para sacar derechos a la clase trabajadora», afirmó.
Fuente: El Eslabón
