La festividad que emerge desde el barrio Ludueña desde hace 17 años, celebra el espíritu carnavalesco junto al cumpleaños de Pocho Lepratti a partir de su asesinato en 2001, se propone en esta nueva edición tener una fuerte mirada de género y de resistencia a las políticas macristas.
El 17º Carnaval Cumple de Pocho, emblemático en el barrio Ludueña ya se palpita en las inmediaciones de la Plaza del Pocho, ubicada entre Larrea y Vélez Sarsfield, en la zona noroeste. Este próximo 25, 26 y 27 de febrero, las calles se colmarán de pibas y pibes, de vecinas y vecinos, murgueras y murgueros, cantantes, militantes barriales y cientos de personas que participarán de los talleres que refuerzan este evento social, cultural y político.
“Organizando la bronca empuñamos una alegría que se grita, encontrándonos en el latido de esta calle, calle que es el carnaval”. Ese es el concepto que sobrevuela este año, y que cuenta Erica Pereyra, integrante del Bodegón Casa de Pocho y referente de la Murga Los Trapos.
El eje de las temáticas de esta festividad barrial y popular comenzó a trabajarse en diciembre pasado, un mes conmocionado, que tiene marcado a fuego el día 19 que remite al asesinato de Claudio Pocho Lepratti en el barrio Las Flores en 2001, a manos de la policía santafesina y en pleno estallido social.
“Esto de organizar la bronca tiene que ver con lo que nos viene atravesando a toda la sociedad. Y es el punto de partida de este carnaval: el asesinato injusto de un compañero en su lugar de trabajo. Esto viene a poner en jaque estas cuestiones, porque nosotros no recordamos el 19 de diciembre solamente que fue un hecho terrible, sino que reivindicamos su vida en dignidad. La dignidad de un compañero que ha dejado muchas semillas en Ludueña”, sentencia la militante y murguera.
Para Pereyra como para sus compañeros y compañeras “el carnaval es un escenario político y no un show”. “Para nosotros no es una realidad paralela a lo coyuntural, es un espacio donde podemos empuñar palabras desde un escenario colectivo, cuerpo-carnaval, todo esto que nos atraviesa pero situados desde un lugar de dignidad, que es lo único que no nos van a arrebatar”, aseguró.
Fundir en el fuego la opresión
Peri, como la llaman en el barrio, anticipa que el carnaval se viene con muchas broncas y muchas preguntas. “Viene de color violeta ya que después de largas jornadas de trabajo, de profundizar, discutir y charlar con distintas dinámicas, las mujeres de la organización nos preguntamos qué pasa con nuestros cuerpos. Por eso, en este espacio ritual del carnaval traemos a Moma, que en el fuego va a fundir todo símbolo de opresión y va a multiplicar nuestros gritos con digna rabia”. “Entendimos que el auge de los movimientos y organizaciones feministas son un quiebre ideológico después de siglos de invisibilización de la violencia contra la mujer, siendo conscientes también de que los palos del gobierno van a seguir estando, y que en momentos de ajuste como estos es cuando más se cristaliza la violencia machista”, explicó.
El Carnaval Cumple de Pocho contará también con talleres, tres de ellos referidos justamente a cuestiones de género, a la tópica vertebral de esta edición, con sub temáticas como el aborto y la resistencia desde la perspectiva femenina, talleres para niños con prácticas de origami y máscaras, canto, talleres de murgas uruguayas y rosarinas, y el taller de la memoria. Desde Buenos Aires llegará la kermés “Che pibe”, que coordina la organizació Lucha Popular. Habrá intervenciones artísticas con presentaciones de las murgas Okupando Levitas, Insoportables de Latinoamérica, Chapitas de la República, La Guevarata, Futuritos de Fioritos, Los Retumbones Desbocados, Caídos del Puente, Mal ejemplo, Modestia Aparte, y Murga de los Trapos; y las agrupaciones Marionetas, La Semilla, ensamble entre Dúo Remolinos y Zapatea Lechuzas, Ebrios de Carnaval , Aguirre Veracruz, La Pocilga, Anahí, Ataque en la olla, Varón, Farolitos,y Chiquita Machado, y bandas de cumbia, chamamé y folclore.
Nota publicada en semanario El Eslabón número 339.