La muerte del jerarca de la dictadura Luciano Benjamín Menéndez, condenado 14 veces a prisión perpetua por crímenes de lesa humanidad, disparó una explosión de manifestaciones en las redes sociales.
“Acaba de fallecer el genocida Luciano Benjamín Menéndez. Símbolo y rostro del horror en Córdoba y las provincias que abarcó el III Cuerpo de Ejército. Dueño de la vida y la muerte, se llevó el muy cobarde a la tumba el destino de miles de Desaparecidas y Desaparecidos. No murió impune gracias a la lucha del pueblo argentino en general y de los Organismos de Derecho Humanos en particular. Ni el flaco perdón de dios”. El texto, posteado en la cuenta de Facebook de la regional Hijos Córdoba, fue uno de las tantas despedidas que organismos de derechos humanos y usuarios de internet, utilizaron para expresar su repudio al represor fallecido este martes.
Según los fundamentos de sus condenas judiciales, Menéndez fue el principal responsable del «plan sistemático y generalizado de exterminio de la oposición política» aplicado durante la última dictadura cívico y militar (1976-1983) en Córdoba y en otras nueve provincias del noroeste.
En su carácter de jefe del Tercer Cuerpo de Ejército y de la llamada Área 311, que abarcaba diez provincias, Menéndez impartía órdenes e instrucciones, supervisaba sus resultados y generaba las condiciones para que sean eliminadas todas las pruebas para que sus autores tuvieran impunidad.
«Esas maniobras le permitieron ser el dueño absoluto de la disponibilidad de personas”, definieron los jueces en sus fallos sobre el accionar del fallecido represor.
En 2008, Menéndez comenzó a ser juzgado en Córdoba y luego en distintos puntos del país por los delitos privación ilegítima de la libertad, imposición de tormentos agravados, tormentos seguidos de muerte, homicidio calificado y tentativa de homicidio calificado, entre otras acusaciones.
Hasta el momento había recibido 14 condenas, 12 de ellas a prisión perpetua, y en Córdoba afrontaba un nuevo proceso de enjuiciamiento que había comenzado el 21 de noviembre del año pasado, y que hoy transita la última etapa de recepción de pruebas testimoniales.
Menéndez había nacido el 19 de junio de 1927 en San Martín (Buenos Aires) y actualmente residía en el Barrio Bajo Palermo de la ciudad de Córdoba.
Este martes, tras conocerse la noticia, las redes sociales explotaron en manifestaciones de repudio que expresaron el nivel de condena que persiste en la conciencia política argentina sobre los criminales de lesa humanidad que actuaron durante la última dictadura cívico militar.
“Se murió la muerte: a las 11:20 murió el genocida Luciano Benjamín Menéndez. A diferencia de sus víctimas, se sabe la hora, el lugar y su familia puede despedirlo. Llegó a ser condenado en cárcel común, perpetua y efectiva, el único lugar para un genocida. ¡30.000 PRESENTES!”, escribieron desde Hijos Capital.
⚡ El genocida argentino Luciano Benjamín Menéndez murió a los 90 años; tenía 12 sentencias a cadena perpetua por crímenes de lesa humanidad.https://t.co/4H2WdvyrsK
— Twitter Moments en Español (@MomentsES) 27 de febrero de 2018
SE MURIÓ LA MUERTE: a las 11:20 murió el genocida Luciano Benjamín Menéndez. A diferencia de sus víctimas, se sabe la hora, el lugar y su familia puede despedirlo.
Llegó a ser condenado en cárcel común, perpetua y efectiva, el único lugar para un genocida.
¡30.000 PRESENTES! pic.twitter.com/WphGEMbsKh— H.I.J.O.S. Capital (@hijos_capital) 27 de febrero de 2018
Secuestro y degollo a mi Abuelo, fusiló a mi Tío. Se llevó a la tumba dnd están los nietos apropiados y los cuerpos de los desaparecidos para poder enterrarlos y los que creemos en dios darles cristiana sepultura. El infierno lo espera y la memoria histórica lo condena x siempre. pic.twitter.com/kGrLlL79YM
— Camilo Vaca Narvaja (@VacaNarvaja) 27 de febrero de 2018
