Los ediles de la ciudad se sumaron este martes al repudio de la Multisectorial contra la Violencia Institucional, y acompañaron a familiares de los jóvenes víctimas del accionar policial.
Desde la comisión de Derechos Humanos se convocó a participar a la conferencia de prensa y movilización que realizaron este martes los familiares de Maxi Zamudio, de 16 años, y Alejandro Ponce, de 23 años, quienes murieron el 27 de mayo y el 31 de octubre de 2015 respectivamente, en distintos episodios que involucran a fuerzas de seguridad.
De esa convocatoria organizada por la Multisectorial contra la Violencia Institucional, participaron la concejala Celeste Lepratti, del Frente Social y Popular; Roberto Sukerman, del Frente para la Victoria-PJ; Pedro Salinas y Eduardo Trasante, de Ciudad Futura, y María Fernanda Gigliani, de Iniciativa Popular.
Durante la movida llevada a cabo esta mañana, los organizadores cortaron calle Balcarce –a la altura del 1900– donde funciona el Centro Territorial de Denuncias y se encuentran las autoridades del Ministerio Público de la Acusación.
Lepratti, presidenta de la comisión de Derechos Humanos, destacó que “se determinó acompañar a los familiares de las víctimas en la campaña para exigir la reapertura de las causas que fueron archivadas”, y al respecto, señaló que “no se tuvieron en cuenta las medidas solicitadas por sus abogados”. Además, respaldó el pedido de una audiencia al fiscal regional Patricio Serjal.
En un documento, desde la multisectorial recordaron que “Maximiliano Zamudio fue asesinado el 27 de mayo de 2015 en barrio Tablada por el prefecto Ariel Condori Apaza de tres disparos provenientes de un arma no reglamentaria”, y que “Alejandro Ponce fue perseguido junto a su hermano por policías el día 31 de octubre del año 2015. Su hermano sobrevivió y contó que ambos se tiraron al río Paraná y luego quisieron volver a tierra. Él pudo subir, pero Alejandro no sabía nadar, y los policías le tiraron piedras y no lo ayudaron a salir”.
