El costo de vida en los barrios populares de Rosario volvió a subir en marzo y se calcula que una familia necesita 21.023 pesos para cubrir sus necesidades básicas. El dato se desprende de un informe de CESO (Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz), según el cual el incremento significa un 4,5 por ciento más que en diciembre de 2017.
El trabajo –que a diferencia del Indec toma como eje una canasta de productos modesta de barrios periféricos rosarinos– indicó también que en las zonas más vulnerables la población prácticamente no tiene capacidad de ahorro y gasta todo su ingreso para satisfacer las necesidades de alimentación, transporte y servicios.
También se desprende del estudio que el salario mínimo, vital y móvil apenas alcanza a cubrir la mitad de la mencionada canasta y que el principal incremento volvió a ser liderado por los alimentos, cuyo costo trepó en marzo a 8.525 pesos por familia.
De Ponti de punta
“Es necesario plantear de forma urgente medidas concretas para revertir esta situación”, planteó la diputada nacional Lucila De Ponti, quien se refirió a los aumentos reflejados en el estudio del CESO.
Para la legisladora del Movimiento Evita, “este ajuste al bolsillo golpea de forma violenta e injusta a los sectores más vulnerables”.
De Ponti fustigó las políticas económicas del gobierno nacional y remarcó que “con los aumentos y tarifazos las familias de los barrios populares ya no pueden hacer frente ni a las necesidades mínimas”.
