Con Manifiesta (cuerpo en expansión), la directora expone la represión corporal en la vida cotidiana capitalista. Viernes a las 21 en el Cultural de Abajo, Entre Ríos 579.
Manifiesta es una obra de carácter performático, que ironiza, y reflexiona sobre la opresión ejercida en el cuerpo de mujer, como reivindicación de la libertad perdida en todos los cuerpos. Es una idea original de Carla Tealdi y está protagonizada por Jésica Biancotto, junto al acompañamiento musical de María Belén la Rocca e Inés Dotto.
La directora contó a este periódico algunos conceptos que rodean a la obra, un trabajo de investigación que realizó junto a Biancotto durante un año y medio.
“Yo venía con la idea de trabajar la problemática de la mujer –recuerda Tealdi- en realidad, en principio tenía muchas ideas vagas de lo que me pasaba a mí misma y armé un tipo de manifiesto. Después la convoqué a Jésica, con quien habíamos estudiado actuación en la Escuela de Teatro y Títeres. Fue un trabajo intensivo entre las dos. Con la obra fuimos trabajando la no libertad del cuerpo de la mujer, y el cuerpo de todos”.
Manifiesta interpela al espectador: “El lenguaje, tanto dramatúrgico como el de las acciones, está ligado a lo que nosotros vivimos hoy en día. Hay mucha carga visual, expresiva, de percepción”, cuenta Tealdi, y apunta: “El cuerpo es el protagonista de la obra, nuestro proceso de búsqueda tuvo que ver en la idea de cómo sería el cuerpo si fuera libre. Toma como base rituales cotidianos que se incorporan diariamente a la vida de hombres y mujeres, que no tienen nada de natural”.
Muchos de estos conceptos surgen en torno al libro Para acabar con la masacre del cuerpo (1973), del filósofo Félix Guattari: “Es como un manifiesto de la libertad perdida de los cuerpos y cómo el capitalismo nos utiliza o nos manipula físicamente”, sostiene Carla en referencia a la obra del también psicoanalista francés.
Todos los cuerpos
“El proceso fue difícil y fue complejo para mí”, admite Tealdi. Se refiere a la construcción de su primer unipersonal como escritora, dramaturga y directora. Y otro rol que no es secundario en Manifiesta: Tealdi se encarga de la iluminación e interviene –con sus dispositivos– las intensidades a las que se somete el cuerpo que representa Biancotto, con la tensión de fondo que genera la música de un violín.
El cuerpo de la actriz está de lleno en el escenario circular del Cultural de Abajo. Pero los otros cuerpos –e incluso sus miradas cosificantes– están presentes. Por eso interpela ante el espectador un provocador: “¿Quién quiere mi culo? Yo soy democrática, hay un poco para cada uno”.
La directora comenta: “Poder generar acción con un solo cuerpo fue un desafío, con una narración que es la que a mí me gusta, que parte de las acciones y no del texto. Aparecen dos cuerpos en escena y enseguida empieza a suceder algo. Con un solo cuerpo, es otra cosa. En ese sentido, trabajamos mucho lo conceptual con otros artistas que son parte de la obra, algo que se ve reflejado en la música, la estética y el vestuario».
Manifiesta (cuerpo en expansión) se fue resignificando. “Fue bastante progresivo, tenía tanta características en relación a la reivindicación con respecto a los derechos y deseos de la mujer. Yo no lo había planteado así en el principio fue algo que surgió más desde la experiencia personal, pero hubo mucha repercusión en las mujeres, claro que también los hombres se interesan pero se empezó a correr la voz de las mujeres, y se fueron invitando unas a otras”, explicó Tealdi.
En 2017 la obra participó del Encuentro de Mujeres en Chaco y del ciclo Teatro X la Identidad. En 2018, en tanto, fue parte de la primera edición del ciclo local Ellas, a cargo de directoras mujeres; y del Festival Internacional de Artes Escénicas El Cruce, entre otros encuentros relacionados con derechos humanos y género. Recientemente fue seleccionada en la Fiesta Provincial para participar del Encuentro Regional de Teatro organizado por el Instituto Nacional del Teatro. El año pasado hicieron campaña informal de afiches por las calles de Rosario con fotos de la obra: un cuerpo aplastado, sufriente, sujetado. “Es como una obra paralela. Pensamos que en el espacio público tienen que suceder cosas que interpelen, que generen reacción”.
Ficha técnica y artística
Diseño y realización de vestuario: María Pilar Ramos
Diseño gráfico: Lucía Masellis
Asistencia coreográfica: Virginia Brauchli
Asistencia artística: Dolores Tealdi
Producción / asistencia: Federico De Battista, Julia Tarditti
