El grupo rosarino encabezado por el vocalista Lolo Luciani, completó el tercer volumen de su cuarta producción discográfica con la que regresó a la contundencia de sus comienzos.
Fluido se originó allá por el año 2000 en Rosario. Inspirados por el sonido y la estética del estilo new metal, difundido por aquellos años fuertemente entre los jóvenes, el grupo comenzó a experimentar su propio camino a fuerza de composiciones propias. Luego de un tramo de casi 18 años, presenta su cuarto disco compacto “Umbral”, escindido en tres actos lanzados entre el año 2016 y la actualidad.
El sábado 10 de agosto, la banda integrada por Leonardo Luciani en voz; Javier Vega en bajo; Max Mateo en batería; y Rodrigo Prado en guitarra, presentará la totalidad del disco en el teatro Vorterix, Salta 3519, junto a los grupos Cabezones y Hotel Rush.
En diálogo con este periódico, Luciani, vocalista histórico del grupo, anunció que tocarán en vivo la obra completa. “De hecho se va hacer el disco físico con todos los temas y después un box con los tres volúmenes por separado”, detalló.
Lolo, como se lo conoce en la escena roquera, contó también que el material se grabó durante 2016, posteriormente a una serie de presentaciones que el grupo hizo a propósito de sus 15 años. “El motivo de lanzar un disco en tres partes tuvo que ver con el deseo de que la gente pudiera digerir bien los temas. Por ahí en un disco largo se pierden ciertas canciones. El hecho de tirar cuatro de entrada hizo que la gente ya se los conociera, y se generara esa expectativa de lo que venía. De hecho, cuando presentamos el segundo volumen ya muchos se sabían los ocho temas.”
La coyuntura tecnológica plagada de información y multiplicidad de plataformas genera impaciencia, admite Luciani: “Como las películas, estamos en la era de las series. Y pasa también con los videoclips. Ahora con las redes sociales todo tiene que ser más corto y engancharte desde el comienzo, porque si no te llama la atención, uno cambia por la cantidad impresionante de cosas que hay para seguir viendo. No tenemos un registro de otra banda que haya publicado un disco en tres volúmenes, pero más allá de eso nos pareció una buena idea fraccionar un poco para que se pueda escuchar”.
Más heavy
Hace un par de años Fluido celebró su disco Complementos, a un década de su lanzamiento. El material fue su primer larga duración de la banda, sucesor de una serie de publicaciones –el demo Fluido en 2012, y el EP Estímulo en 2005–. Y antecesor de los discos En órbita y Desde el aire.
“Nosotros hicimos dos discos cancioneros de los cuales estamos muy orgullosos porque queríamos en ese momento sacarnos la etiqueta del new metal, no porque sea un estilo que no nos represente, sino que queríamos mostrar otro lado compositivo que fue el que pudimos lograr. Fue un gusto artístico que nos dimos. Y cuando volvimos a hacer los temas viejos del disco Complementos, volvimos a los riffs, a afinar graves, y todo eso nos cebó mucho, nos prendió fuego, terminamos haciendo más heavys que antes, más fuertes, más graves, más rifferos, por eso hablamos de umbral, de que lo cruzamos. Pasamos ese límite porque volvimos a la esencia, y hasta nos pasamos un poco de rosca todavía”.
Umbral remite por un lado a las fronteras del sonido como también a los conceptos vertidos en las letras, como se escucha en el tema homónimo alojado en el volumen 3, donde se puede leer cuestiones de coyuntura y de la sociedad actual.
“Tiene que ver con darse lugar a uno mismo, con creer en lo que uno sueña, con sentirse con la certeza de decirlo, en confiar en lo que uno siente, sacarlo para afuera y todo eso que tanto nos cuesta en la sociedad de mierda en que vivimos”.
Músico, cantante y docente, Lolo Luciani desmenuza el sonido y cortes musicales que constituyen a la banda. “Somos un poco una mezcla. Tenemos bases de new metal que se pueden ver reflejadas más en la parte instrumental que vocal ya que no canto carraspeado, ni grito, ni rapeo, y toda esa cosa que tiene ese género. Entonces es una mezcla de metal y de rock fuerte, con una cosa más armónica, mezclada con tintes de rock nacional, porque nosotros escuchamos desde Deftones al Flaco Spinetta”.
Luciani rememora su primer registro con la música. “Tengo una foto de mi abuela cuando yo tenía un año sentado en el piano, muy feliz. Pero concretamente empecé a estudiar piano en un conservatorio a los siete años, ahí empezó todo. Mi abuelo era tenor, cantante de ópera, cantaba acá en El Círculo. Mi otro abuelo también era músico. Mi viejo vive en Francia y es batero. Mi primo también toca. Y mi hermano Franco (Luciani, el armonicista), así que la música siempre estuvo presente”.
Fuente: El Eslabón