Provocadora y política, la obra dirigida por Carla Saccani -que se extiende a lo largo de cinco horas en dos actos- pone en evidencia las relaciones de poder en un populoso barrio en plena coyuntura electoral.

Cualquier semejanza con la realidad es pura coincidencia, se debe aclarar. Octaedro 2015 d. C es una historia de traiciones y conspiraciones que se tejen desde un multimedios, una agrupación política marginal y una iglesia adoradora de gatos,  para entregar al narcotraficante más importante de Latinoamérica durante las elecciones provinciales del año 2015, en Rosario. La dramaturgia surgida del Laboratorio Teatral de Carla Saccani y Marina Lorenzo lanzó una nueva temporada con dos primeras funciones el 18 y 25 de agosto a las 20 (el primer capítulo), y a las 22.30 (el segundo), esta vez en el espacio de La Sonrisa de Beckett, Entre Ríos 1051.

Una de sus protagonistas, la actriz Marta Fritschy, dialogó con este periódico sobre el desafío que representa ser parte de una historia semejante, con gran cantidad de compañeros y compañeras en escena, y una duración total de cinco horas. Sí, leyeron bien los lectores, la obra dura unas cinco horas en dos capítulos con un descanso, y 18 personas en escena.

“Octaedro no alude a ningún barrio real”, aclara Fritschy, ante la sugerencia que propone la sinopsis de la  obra, aunque admite que ese territorio sería similar a la Villa 31, de Buenos Aires; o la Rocinha, de Río de Janeiro. “En ese barrio se cruzan universos diversos relacionados entre sí”, indica la actriz que encarna a Teresa de la Flor, la líder de una agrupación política marginal que es parte de una red de relaciones en torno a la tríada integrada por un capo narco, Tito Molleja, su socio encubierto, el dueño de un multimedios local llamado Ovidio Heidi Ríos, y la congregación de una iglesia encabezada por Claudia, la hermana travesti de Tito, y su esposa.

“Estos cuatro universos se cruzan en una historia de traiciones y conspiraciones. Y a su vez, entre los protagonistas se evidencian relaciones familiares complejas, por momentos llevadas a un extremo de disputa. La política, la religión, los medios y el narcotráfico conviven y se colisionan en una trama de hiperrealismo que no podemos dejar de relacionar con la realidad que vivimos todos los días”.

Este imaginario que describe Marta Fritschy, emergió en base a improvisaciones surgidas de la pluma de la actriz, docente, y directora Carla Saccani, y se fue gestando una historia tragicómica. Fritschy dice al respecto: “Su imaginación creadora, y probablemente nuestros cuerpos en acción, moldeados desde su fascinante dirección, fueron creando y concretando el mundo del Octaedro”.

“Dirigir a tanta gente en una obra tan larga es sin duda un desafío enorme”, afirma la actriz santafesina radicada en Rosario desde los 17 años. “Coordinar horarios de ensayo ya es en sí mismo un trabajo enorme. La intensa energía y el amor por el teatro que Carla pone todo el tiempo hacen posible llevar a puerto el desafío. Su entusiasmo es sin duda contagioso, por eso todos los actores nos sumamos y la adrenalina circula”.

El tiempo de la trama de Octaedro lo marcan las elecciones: el armado de las listas, la campaña y los resultados. En este contexto, Fritschy describe a su personaje Teresa de la Flor: “Es una vieja militante de izquierda, marginal, siempre perdedora, que al final de su carrera desea profundamente acceder al poder como sea. Es un ser que sufre en el fondo, que no puede dejar atrás su conciencia y también un poco, su resentimiento”.

El gran relato

En época donde la tendencia es la síntesis, la obra que Saccani co-dirige con Lionel Fuentes se toma un tiempo considerable para contar una historia tragicómica.

“Ella (por Carla) planteó simplemente: «¿por qué no?». Es decir, planteó el desafío y también la posibilidad de permitirnos el tiempo para una historia larga. Así como se ven varios capítulos seguidos de una miniserie, también podemos permitirnos que el teatro sea un acontecimiento no acotado, que se desarrolle sin la brevedad habitual. Además, permite que  los actores cuenten sus propias historias dentro de la dramaturgia”, señala la entrevistada

La obra se desarrolla en dos capítulos, lo que permite un entreacto para degustar un sanguchito y alguna bebida. Y posiblemente sirva como espacio de reflexión de lo acontecido, o como adelanta Fritschy para los que no la vieron todavía, a escuchar o cantar: “El primer capítulo nos sitúa con los personajes, nos permite entrar en sus vidas y en sus contradicciones. El entretiempo es breve y durante ese lapso se canta una canción que se arenga en la campaña política de la agrupación de Teresa de la Flor, muy divertida, y el público tiene posibilidad de participar”.

La nueva temporada de Octaedro se verá también durante septiembre: los domingos 2, 9, 16, 23 y 30, a las  17 (primer capítulo) y 19:30 (segunda capítulo).

“Es una experiencia fuerte porque se trata de una propuesta teatral diferente, un acontecimiento teatral. En el reestreno se renovó la mitad del elenco y la obra adquiere matices algo distintos. El público disfrutó de la dramaturgia y se sintió identificado en los distintos episodios con la actualidad de la ciudad. La obra pega saltos por el humor y el drama, y los comentarios surgieron tanto desde lo reflexivo como desde lo emocional. Es que la dramaturgia interpela todo el tiempo, desde diferentes lugares”, asegura Marta Fritschy.

Ficha técnica y artística

Dramaturgia: Carla Saccani

Dirección: Carla Saccani y Lionel Fuentes

Producción Ejecutiva: Rocío Luna

Actúan: Marcos D’Agostino, Lala Brillos, Elías Blanco, Salvador Sauan, Noemí Asenjo, Esteban Cavallero, Juan Carlos Capello, Celia Parola, Claudio Danterre, Marta Fritschy, Emmanuel Alanis, Alicia Oddo, Daniel Basilio, Agustina Rosso, Armando Durá, Juli Morán, Sofía Dibidino y Christian Ledesma.

Asistencia de dirección: Mauricio Vera Prato

Asistencia de Producción: Lucía Basaldella y Brenda Díaz

Música original: Lionel Fuentes

Iluminación: Carla Saccani

Vestuario: Florencia Marting

Escenografía: Romina Carrara y Cristian Grignolio

Foto: Yamila Suárez

Trailer: Renzo Corrado y Rocía Luna

Diseño gráfico: Tinta comunicación visual

 

 

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