Bajo el lema “basta de travesticidios”, la 13ª edición de la Marcha y Festival del Orgullo en Rosario culminó este sábado con una enorme movilización que fue desde la plaza Libertad hacia el Monumento a la Bandera.

Más de 15 mil putos, tortas y travas, entre otros –acompañados por organizaciones feministas, disidentes, gremiales y políticas– inundaron las calles de la ciudad de colores, brillos y reclamos. Reivindicaron el orgullo como respuesta política a la homofobia, y reclamaron por el fin de los travesticidios.

En un evento que combinó celebración y lucha, un mar de gente de todas las edades e identidades se congregaron en la Plaza Libertad para luego marchar por el centro rosarino, con el objetivo de visibilizar la lucha del colectivo LGBTIQ+.

En esta edición hubo especial énfasis en denunciar el crecimiento de la violencia institucional que tiene como blanco al colectivo trans, y en reclamar la aprobación e implementación sin demoras del cupo laboral para este colectivo en Santa Fe, proyecto que hace 10 días alcanzó la media sanción en la legislatura provincial.

Esteban Paulón, subsecretario de Políticas de Diversidad Sexual de la provincia, señaló que “vamos por más derechos e inclusión, para defender los logros conquistados y para gritar bien fuerte Basta de travesticidios y ponerle freno a la ideología del odio”.

Por su parte, el referente de Patria Grande, Fernando Rey, declaró que “es hermoso ver cómo cada año la marcha y festival del Orgullo crece en convocatoria en nuestra ciudad, porque es una muestra de que cada vez somos más quienes nos comprometemos en la lucha por una Rosario más diversa e igualitaria”.

“Así como militamos por trabajo digno, por la educación pública, por la memoria, la verdad y la justicia, luchamos por la libertad de ser quienes somos. Como nos enseñó Carlos Jáuregui, en una sociedad que nos educa para la vergüenza, el orgullo es nuestra respuesta política. Por eso este día es de fiesta, y también de lucha”, agregó.

La Jornada que arrancó a la tarde con la concentración en la plaza ubicada en Mitre y Pasco, culminó con un festival con bandas en vivo en el parque del Monumento a la Bandera.

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