El gobierno nacional negoció con empresarios y la CGT un plus salarial de 5 mil pesos para trabajadores del sector privado con el fin de atenuar la disparada inflacionaria. Será como adelanto de paritarias, fraccionado y, si bien es “obligatorio”, no todas las firmas podrán cumplir con su pago.
Después de arduas negociaciones, el gobierno de Mauricio Macri consiguió una curita para el cortante golpe inflacionario que consintió tras las Paso. Cambiemos, cámaras empresariales y gremialistas de la CGT acordaron una recomposición salarial de 5 mil pesos para empleados del ámbito privado a cuenta de futuros aumentos en paritarias, a diferencia de lo convenido en el sector público nacional.
El plus salarial, casi una limosna tras la remarcación masiva de precios por la megadevaluación, será no remunerativo, su pago podrá hacerse en cuotas y no son pocas las empresas, sobre todo pequeñas y medianas que trabajan a media máquina, que ponen en duda el pago porque están en una situación compleja, según argumentaron.
En rigor, del lado de los más grandes, que en ciertas ocasiones se escudan en la crítica situación de las pymes, el presidente de la Unión Industrial Argentina, Miguel Acevedo, había dicho 24 horas antes de la firma del bono que los empresarios no estaban en condiciones de afrontarlo por el contexto de “enorme recesión” económica que atraviesa el país.
En medio de la emergencia laboral, con suba del desempleo y en los niveles de precarización laboral, consumo planchado y cierre de fábricas a diario, el gobierno trata de plasmar el paquete de medidas anunciado tras el revés en las urnas como para frenar un poco el incesante recorte en el poder adquisitivo de los ingresos de la población durante la gestión Macri, avivado tras la última corrida cambiaria y el impacto en las góndolas que tuvo el salto del dólar.
Cuando todavía se define la letra chica del convenio, y algunos grandes empresarios que antes acompañaban al gobierno ahora lo acusan de no tener plan productivo y destruir la industria nacional, otros sectores no quieren quedarse atrás. Docentes universitarios agrupados en Conadu Histórica anunciaron un paro de 24 horas para este miércoles en reclamo de un aumento salarial que compense la pérdida de poder adquisitivo por inflación y de un bono de 5.000 pesos.
Cambio y ajuste
Frente al debate del bono y para dimensionar el ajuste salarial que realizó Cambiemos, la consultora Synthesis calculó que para recuperar el poder adquisitivo que tenía un trabajador registrado a fines de 2015, este debería recibir un bono salarial de 250 mil pesos en promedio.
Según Synthesis, cuyo director es el ex titular del Banco Central durante el kirchnerismo Alejandro Vanoli, el poder adquisitivo de los asalariados registrados perdió aproximadamente 17 por ciento, mientras que el salario mínimo vital y móvil cayó 33,6 por ciento.
En tanto, el haber mínimo jubilatorio y la asignación universal por hijo (AUH) cayeron 20,5 y 6,3 por ciento, respectivamente. Los jubilados que cobran la mínima y aquellos beneficiarios de la AUH deberían cobrar un bono de más de 60 mil y casi 9 mil pesos para recuperar poder de compra.
La consultora indicó que “el resultado de las elecciones Paso de agosto quebró la calma cambiaria y con el nuevo salto del dólar, cercano al 25 por ciento en esta oportunidad, la inflación se aceleró y superará las estimaciones anteriores”.
Desde que asumió Cambiemos, “los asalariados fueron uno de los sectores más perjudicados por la política económica implementada del gobierno”, se advirtió. Para Synthesis, en los últimos cuatro años predominó la “lógica empresarial de que los salarios forman parte del costo a reducir” y no constituyen “un elemento de fomento a la demanda interna”, por lo cual era “necesario reducirlos”.
