El gobierno boliviano invitó este lunes a organismos internacionales y países a acompañar el conteo oficial de votos para garantizar transparencia de los comicios luego de las denuncias de los opositores que consideraron que el gobierno suspendió arbitrariamente el escrutinio provisorio al llegar el 83,7 por ciento de las actas verificadas.
El escrutinio de las elecciones presidenciales en Bolivia quedó clavado el domingo a la noche en el 83,7 por ciento de las actas verificadas, con una ventaja de 7 puntos para Evo Morales sobre Carlos Mesa. La diferencia a favor no le alcanzaría para evitar el balotaje, debería superar el 50 por ciento y hasta ahora tiene el 45,28. También si se impone por más de diez puntos lograría ganar en primera vuelta.
Así los votos que restan constatar, de zonas rurales alejadas, podrían darle el triunfo definitivo al oficialismo.
El Tribunal Supremo Electoral (TSE) justificó el parate del conteo, a problemas originados en los centros de votación de zonas rurales de monte adentro. Es en esas regiones la fuerza oficialista, el MAS, ha mantenido una hegemonía histórica, de ahí la confianza del gobierno de una posible victoria.
Así, el voto rural será el que definirá si Morales evita el balotaje o no. El tema es que este conteo final, ahora sospechado por los opositores, podría extenderse en el tiempo hasta la próxima semana.
El canciller Diego Pary invitó este lunes a organismos internacionales y países a acompañar el conteo oficial de votos de las elecciones generales , con el objetivo de garantizar la transparencia de ese proceso.
«Nos interesa que el proceso concluya con toda la transparencia necesaria (…) y estamos totalmente predispuestos a cooperar para que los diferentes países interesados hagan seguimiento al proceso de conteo», dijo en conferencia de prensa.
«Si es necesario y si así lo consideran pertinente, también se podrá hacer un conteo con transmisión pública, nosotros vamos a garantizar ello», agregó Pary, acompañado por el ministro de Comunicación, Manuel Canelas, según publicó la Agencia Boliviana de Información (ABI)
El Gobierno asumió esa posición ante los cuestionamientos de la oposición al trabajo Tribunal Supremo Electoral (TSE) y horas después que el candidato presidencial por Comunidad Ciudadana, Carlos Mesa, que llegaba casi al 39 por ciento de los votos, llamara a sus seguidores a movilizarse para garantizar una segunda vuelta.
En ese marco, el canciller anunció varias reuniones con diferentes misiones de observación electoral: «Estamos invitando a los embajadores de Brasil, Argentina, al encargado de negocios de Estados Unidos, a los organismos internacionales», apuntó.
De darse una segunda vuelta sería una noticia histórica porque sería la primera vez que en Bolivia se lleve a cabo un balotaje, en diciembre.
En tanto, la sorpresa fue el porcentaje que obtuvo el Partido Demócrata Cristiano (PDC) liderado por el coreano Chi Hyun Chung, con 8,7 por ciento y que desplazó al candidato por Bolivia Dice No (BDN), Óscar Ortiz, que logró un 4,5 por ciento.
Según los datos de la consultora privada Víaciencia, de confirmarse esta tendencia Morales perdería, por primera vez, los dos tercios en la Asamblea Legislativa registrándose un empate con la oposición en la Cámara de Senadores y una mayoría opositora en Diputados.
Según estas proyecciones, el MAS obtuvo 18 senadores, CC sacó 17 y Bolivia Dice No obtuvo uno, haciendo un total de 18 para la oposición.
En la Cámara de Diputados, donde se hace mayoría con 66 votos, el MAS habría sacado 62 diputados, la fuerza de mesa, Comunidad Ciudadana (CC), 56; PDC 9 y BDN 3, haciendo un total de 68 para la oposición. Pero estos resultados están sujetos a posibles variaciones en función a los datos de los diputados uninominales.
Según la tendencia de Víaciencia el MAS ganó en cinco de los nueve departamentos y CC se impuso en cuatro.
