La Federación Asociativa de Diarios y Comunicadores Cooperativos de la República Argentina (Fadiccra) cuestionó la ocupación de medios públicos en el país vecino y a las corporaciones mediáticas argentinas por negar la existencia del golpe de Estado.
A través de un comunicado, Fadiccra repudió “de manera enérgica” y condenó “categóricamente” el golpe de Estado que este domingo se perpetró “contra las legales y legítimas autoridades del hermano Estado Plurinacional de Bolivia, el presidente Evo Morales Ayma y el vicepresidente Álvaro García Lineras”.
“Hace tres semanas atrás el pueblo boliviano había consagrado una amplia victoria electoral en las urnas, apenas debatida en cuanto a la correspondencia o no de una segunda vuelta. Luego de la sesgada actuación de la OEA en una revisión sumaria del proceso electoral, y pese a la falta de objetividad de las conclusiones alcanzadas, Evo Morales decidió convocar a nuevas elecciones”, relataron desde la Federación nacional de medios cooperativos.
“Todo ello no impidió la firme decisión golpista de las minorías oligárquicas, al extremismo racial y los sectores de negocios alineados a los intereses de Estados Unidos, de profundizar su estrategia golpista y obtener la renuncia del legítimo Presidente del hermano país”, agrega el escrito.
Los trabajadores y medios de prensa nucleados en Fadiccra señalaron que “en Bolivia se han ocupado los medios públicos, han sido amenazados sus trabajadores de prensa. Han sido asaltados y silenciados distintos medios comunitarios por la ofensiva golpista”. Y agregaron: “Todo ello ha extremado las dificultades en el ejercicio de nuestra tarea profesional durante la jornada. Sin embargo, hemos contado con la solidaridad y el compromiso con la información de las y los comunicadores comunitarios que intentaban no dejar de informar los acontecimientos”.
Sobre los medios de nuestro país, lamentaron que “una vez más, las grandes corporaciones de la comunicación de la Argentina han establecido una estrategia de información decidida a negar la existencia de un golpe de Estado, a legitimar los intereses económicos ocultos detrás de los golpistas, a construir un soporte de legalidad para las instituciones funcionales a la estrategia golpista”.
“Una vez más, las grandes corporaciones económicas de la comunicación en la Argentina han actuado como Tribuna de Doctrina de los golpes de Estado en nuestro continente”, insistieron desde la entidad, y añadieron: “Por esa razón, vamos a seguir insistiendo en profundizar democráticamente la comunicación en la Argentina, volver a recuperar el sentido común en la construcción de información, volver a recuperar la comunicación como un derecho humano”.
“Ese ha sido, es y será siempre el compromiso de las trabajadoras y los trabajadores cooperativos de prensa. Defender la democracia, aún más, cuando está en peligro o se la sepulta bajo los mezquinos intereses de una minoría, como ha sucedido en Bolivia con el golpe de Estado al que asistimos”, cierra el comunicado de la federación que preside Julio Delgado.
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