Citando un informe del Centro de Economía Política de Argentina (CEPA), el presidente Alberto Fernández salió al cruce de los medios de comunicación que intentan establecer la idea de un ajuste a los jubilados a raíz de las últimas medidas anunciadas por el gobierno nacional. “Este es un ejemplo de cómo se desinforma”, twitteó el presidente y desmintió que exista un ajuste sobre los haberes de los jubilados.

“Ciertos medios afirman que ha habido un ajuste sobre los jubilados cuando en realidad eso no pasó. Difunden de modo sesgado un informe del CEPA para poder imponer esa falsa idea del ajuste”, agregó el mandatario en su cuenta personal de Twitter.

Fernández adjuntó el informe completo titulado “Impacto del aumento de las jubilaciones en marzo de 2020” donde el CEPA se pregunta sobre la situación de los haberes recibidos por los adultos mayores. «La masa agregada de jubilaciones alcanza un incremento de casi 8%, mientras que la inflación estimada según CEPA para el período marzo-mayo de 2020 podría sumar el mismo incremento de 8%, entonces no se puede hablar de ajuste sobre los jubilados», indicó el informe, y agrega que «si se analiza el semestre diciembre de 2019 a mayo de 2020, se percibe que la movilidad de diciembre más el aumento por decreto de marzo implica un incremento de 17,3% que alcanza 25,1% si se considera el bono».

A su vez, el estudio explica que, si se considera una inflación de 16,9% para el semestre, la actualización de diciembre más el aumento de marzo quedan por encima, recuperándose un 0,4% del poder adquisitivo sin contar el bono. Si este último es considerado, la recuperación llega a los ocho puntos porcentuales. Si se considera la movilidad anterior, «el nuevo esquema implica casi 4 puntos porcentuales por encima si se considera el bono de diciembre y enero y casi 4 puntos menos si no se toma en cuenta el bono», concluye.

El diario Clarín publicó una nota el sábado pasado en la que afirmaba que el gobierno intentaba un “ajuste fiscal” al aumentar las jubilaciones mínimas permitiendo un ahorro de “$100.000 millones en el año”. En la publicación se vinculaba la decisión a la negociación de la deuda y se asegura que los “acreedores como el FMI reclaman un sendero fiscal que garantice los pagos futuros que surjan de la reestructuración de esa deuda”.

Sin embargo, el CEPA consideró que “una mayor mejora, en términos relativos, para los jubilados de menores ingresos favorece aún más al consumo, el principal componente de la actividad económica” y profundizó: “Además del impacto sobre el bolsillo de cada uno de los jubilados y por ende del nivel de vida, de la distribución de la actualización anunciada depende apuntalar aún más el consumo”.

El centro de estudios que conducen los académicos de Flacso Julia Strada y Hernán Letcher puntualizó que “el incremento de un monto fijo de $1.500 más un 2,3% implica un aumento de casi 8% respecto del monto agregado de jubilaciones previas, es decir, no habría pérdida de poder adquisitivo si se considera una estimación de inflación de 8,04% para el trimestre marzo-mayo de 2020”. Asimismo, precisó que “esta propuesta lleva la jubilación mínima de los actuales $14.068 a $15.892, cuando con la fórmula de movilidad ascendería a $15.694, es decir que el incremento anunciado significa unos $200 adicionales”.

El anuncio

El viernes pasado, en una conferencia de prensa escoltado por el titular de la Anses, Alejandor Vanoli, y la titular del PAMI, Luana Volnovich, el presidente Alberto Fernández, anunció un aumento del 13% para los haberes mínimos de jubilados y pensionados, la Asignación Universal por Hijo y las demás asignaciones familiares. Además, se indicó que habrá unos 170 medicamentos gratuitos para los afiliados al PAMI.
«Nos dispusimos desde el primer día a mejorar la situación de los que peor estaban y es lo que hicimos y seguimos haciendo. Es atender en este caso la situación de los jubilados», explicó Fernández durante su presentación ante la prensa en Casa de Gobierno.

Tras la difusión de la medida, una intensa polémica se expandió por medios de comunicación y redes sociales en torno a la decisión de “achatar” la pirámide, incrementando el porcentaje de aumento para los niveles de más bajos ingresos, que comprenden alrededor del 75% del universo de jubilados, y achicándolos gradualmente para aquellos cuyos haberes superan los 16 mil pesos.

El incremento será percibido por la totalidad de los beneficiarios del régimen general y se compone de una suma fija de $1.500 más un monto del 2,3%. En ese sentido, el aumento equivalente a la jubilación más bajas será del 13% y para la más alta será de 3,75%.

De esta manera, la jubilación mínima pasará así de $14.068 a $15.896. Para quienes perciben en torno a los $20.000, el aumento será de 9,8%; de $25 mil de 8,3%; de $30 mil de 7,3% y $35 mil de 6,6%.

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