Un atado de cigarros, en tiempos de cuarentena, cotiza en bolsa. Las tabacaleras vuelven a producir, pero el producto a la ciudad llegaría recién la próxima semana, según indicaron los quiosqueros. Los memes más fumados.

La ansiedad que genera la falta de fútbol, de actividades físicas, de salidas al parque –entre otras distracciones prohibidas por el aislamiento social– no podrá ser calmada con un par de pitadas. El producto que es perjudicial para la salud escasea desde el comienzo de la cuarentena, y en la ciudad fumarse uno es hoy una quimera.

Pero la nueva fase de la cuarentena anunciada por el gobierno nacional trajo una bocanada de aire (o humo) fresco para los fumadores. Es que entre las actividades exceptuadas figuran las tabacaleras, por lo que el producto volverá a quioscos, estaciones de servicio y comercios desde esta semana, pero en Buenos Aires. Las y los rosarinos deberán esperar un poco más.

Necesito una droga, llamada cigarrillo

“Amigo, el que seguro tiene es el del quiosquito ese que está ahí escondido en la cortada”; “Si conseguís, comprale todos los que tenga”; “¿No te quedó ninguno de los cartones que compraste la vez pasada?”, todos esos pedidos y preguntas obtuvieron en este tiempo respuestas negativas. Los que guardaron, incluso administrando lo que tenían, ya se quedaron sin cartuchos, y aguardan ansiosos como todos, que el producto fabricado en Buenos Aires llegue a las góndolas y mostradores de la ciudad. 

Marcos Difilippo, presidente de la Cámara Rosarina de Kioscos, aseguró que las dificultades por la faltante también la padece el sector que representa, ya que los atados de cigarrillos “en tiempo de pandemia abarcaba casi el 50 por ciento de nuestras ventas diarias, y es un llamador para que el cliente que fuma lleve otros productos”.

En contacto con Redacción Rosario, Difilippo aclaró que existe una demora en las fábricas que ya están en condiciones de producir, ya que primero deben adecuarse a las normas y protocolos sanitarios exigidos por Nación. “Es por eso que la entrega de la mercadería se está demorando”, avisó.

El 20 de marzo se detuvieron las máquinas de las principales industrias tabacaleras, y al agotarse los puchos en los quioscos, afloraron las segundas y terceras marcas, muchas de ellas desconocidas, que también representaron un material importante para abastecer a creadores de memes.

“Las segundas marcas tardaron un poco más en terminar el stock, pero desde hace un par de semanas se quedaron sin mercadería y tampoco están entregando. Esto provoca contrabando de cigarrillos ilegales, que no están autorizados por la Afip”, denunció el representante de los quiosqueros en diálogo con este medio. 

Algunos, los más optimistas, vieron la situación como una posibilidad inmejorable para dejar de fumar. A otros, esa chance les duró hasta que se enteraron que se volvían a producir. Y como es habitual, no hay crisis –política, económica, sanitaria– en la que no entren a jugar los memes. En este caso, el que entró en complicaciones es un vicio, y las redes sociales se hicieron eco.

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