Después de cien largos días del comienzo de la pandemia, comenzaron a asomar composiciones surgidas o finiquitadas durante el confinamiento del virus pandémico que azotó al mundo. Trabajos elaborados en estudios caseros e inspiraciones que surgieron yendo de la cama al living. El EP de Maia Basso, Bebe Tu Mal, es una muestra. Una devolución que hace a la poesía de José Pedroni, desde este siglo, acompañada de una atrapante ficción audiovisual en la que, según relata, hubo que modificar los exteriores por la pandemia y grabar “en una sola locación, interior, y con un equipo reducido”.
El tercer disco solista de Nahuel Antuña, Crónica de los muertos de hambre, es una producción ingente, que el bajista y compositor de Vudú trabajó durante cinco años con baluartes históricos del rock argentino. “Al hacer grabar a gente como Javier (Martínez) y Alejandro (Medina), tuve que ir muy despacito. La última etapa de la pandemia me sirvió para masterizarlo”, le contó a este periódico el músico que lanzó su nuevo material el 28 de junio, el día de su cumpleaños, a través de su canal de YouTube (antucarock), y que espera extenderlo a todos los almacenes digitales a partir del 10 de julio.
Siguiendo la luna
“El principio de la nada o el final de todo”, así define la guitarrista y cantautora Flor Croci al proceso de cuarentena que lleva más de cien días. Como decantación creativa, Croci presenta su inédito Abismo Pop, una canción parida durante la pandemia y transformada en un videoclip secuenciado entre Rosario y el Valle de la luna. Una balada rock-pop que habla de dos corazones que no se encuentran, “y en ese amor no encontrado, pasan cosas en la soledad de la noche abismal”, anuncia la cantante, que eligió el domingo 5 de julio -el día del eclipse penumbral que se verá en el continente desde la madrugada-para estrenar el material a través de la red de redes.
“Las imágenes del videoclip surgen de la idea de lo abismal de la canción, de la ausencia, del vacío, del encuentro y el desencuentro. De lo cóncavo y lo convexo”, explica Croci, y recuerda que con Epuyen Ortega, el artista encargado de las imágenes fijas y el montaje audiovisual, “nos pareció divertida la idea de unir el río Paraná con el Valle de la Luna: un lugar que hace miles de años estaba bajo agua”.
En Abismo Pop, Flor es la voz principal, es la guitarra, el bajo y el sintetizador. Otra gran intérprete la acompaña en la nueva canción: Claudia Puyó. En la batería, Adrián Taka Carlesso, y las grabaciones y el masterizado estuvieron a cargo de Ignacio Molinos, el músico e ingeniero de sonido que conoció con las Alto Guiso, en el registro de su disco Psico Guiso: “Él se encarga de meterle el chimichurri”, desliza.
“Si bien yo estaba pidiendo al universo parar un poco la máquina, la cosa -por la pandemia- fue abismal: muertes, miedo, caos. La verdad, todo muy intensamente fuerte. Y bueno, no está de más decir que me sirvió para hundirme en lo profundo de mis días interminables, de pasar de hacer todo a no tener nada para hacer. Inolvidable para mí, y creo que para toda la humanidad”, le contó La Flor a este periódico.
El EP de Maia Basso, publicado por el sello Polvo Bureau, contiene Mamá Angustia y Cajita de Música, nutriéndose de la poesía de Pedroni, acompañado por sonidos cósmicos en base a las composiciones de Damián Sánchez. Las canciones se terminaron de grabar a fines de febrero y comienzos de marzo. “Mandamos a hacer el master y lo tuvimos listo dos o tres semanas antes de que se declare la cuarentena. Eso modificó todo lo que teníamos pensado para el lanzamiento. Primero, porque estábamos pendientes de cómo avanzaba la situación, y estuvimos a la espera de que quizás esto podía durar solo unas semanas, pero no”.
El rebrote digital surgido de los encierros también influyó en las mareas de músicas y visuales en la web: “Al final hicimos el video en dos semanas -cuenta Basso-, una vez que ya teníamos la fecha de lanzamiento de Spotify, porque también sabíamos que había tanto flujo de música que las plataformas digitales estaban tardando más de lo común en dar las fechas de publicación”.
Anarco funk
Cada track de Crónica de los muertos de hambre, el material solista de Nahuel Antuña, sucesor de La Ley de Entropía (2006) y Sintético (2015), tendrá su producción audiovisual. Para esto, el músico tuvo que realizar un trabajo minucioso de grabación de la música y el video, que realizó remotamente con Claudio Cardone, Guillermo Vadalá, Jorge Araujo, Matías Moro, Rubén Goldín, y Marcelo Gillespi Rodríguez, y otredades como las grabaciones sample de Maceo Parker.
“Hoy está todo en manos de los monopolios”, agita un niño en Exceso de poder, el tema que abre Crónica de los muertos de hambre, y que Nahuel extrajo de Un rey en Nueva York, de Charles Chaplin. El disco se escribió desde una visión suburbana, barrial, y crítica de las instituciones, el status quo y el poder político.
“Si bien son genéricas las cosas que digo, en cuanto a la cuestión del sentido político, me hubiera gustado sacarlo mucho antes, en el momento macrista, que había que gritar un montón de cosas. Pero bueno, lo dije ahora”, aclara Nahuel, que integra hace décadas el grupo Vudú, y cuyo camino solista significa, para él, “prolongar lo que siento».
Para Maia Basso, el contexto de pandemia “mermó un poco la emoción de sacar algo nuevo. Principalmente por la imposibilidad de presentarse en vivo, aunque por suerte ya se está empezando a mover un poco el circuito de recitales, que es la fuente principal y la entrada económica de muchos músicos, músicas y artistas en general”.
Fuente: El Eslabón
Sumate y ampliá el arco informativo. Por 300 pesos por mes recibí info destacada de Redacción Rosario todos los días por mail en tus dispositivos y los sábados, en tu casa, el semanario El Eslabón. Suscribite en este enlace: Redacción Rosario + El Eslabón. O comunicate al WhatsApp +54 9 341 6407379.
