La concejala Verónica Irizar presentó un proyecto para ordenar el funcionamiento de las app y servicios de reparto en Rosario. “No puede haber diferencia entre estas empresas y el resto, y el Estado debe ser quien lo regule”, dijo.

La edil del Frente Progresista exigió en su iniciativa que estas compañías de delivery “cuenten con habilitaciones y condiciones similares al resto” de las empresas del rubro. Y además pidió garantizar mejores condiciones laborales para quienes se desempeñan como cadetes. “El Estado debe ser quien garantice el marco adecuado para estos servicios”, remarcó.

La legisladora local indicó que aplicaciones como PedidosYa, Glovo y Rappi, “han incrementado su importancia y también sus ganancias en el marco de la pandemia del coronavirus”, por lo que elevó al Concejo Municipal una serie de modificaciones a la legislación vigente, que data del año 2000, según informó. 

“En Rosario queremos trabajar para generar esquemas más justos para el funcionamiento de estas actividades. Es imperioso que la ciudad adecue sus normas a la realidad en que vivimos, y es por eso que queremos aportar ideas y soluciones a un servicio que ha sido tan requerido, que emplea a mucha gente y que debe ser tratado como cualquier actividad comercial”, sostuvo.

La ex secretaria de Hacienda de la ciudad incluyó en su planteo la distribución de alimentos, mercaderías varias y los servicios de cadetería y/o mensajería que se realicen mediante el uso de motocicletas, bicicletas, monopatines o cualquier otro tipo de transporte, tanto convencional como eléctrico. 

La dirigente del socialismo indicó que “si bien la discusión laboral de fondo es competencia nacional a través del Congreso, y este es un debate que se está dando en todas las grandes ciudades del mundo, entendemos que los municipios tienen herramientas para regular una actividad que ha tenido ganancias importantes en el marco de la pandemia”.

“Queremos que se generen –continuó Irizar– fuentes laborales genuinas, que los rosarinos puedan tener un buen servicio y que estas empresas funcionen como el resto de los comercios en la ciudad”. Y agregó: “Para ello, los comercios o empresas que presten el servicio de distribución de mercadería en los términos de esta ordenanza deberán contar con local debidamente habilitado por la municipalidad”.

Al respecto, la concejala añadió: “Además, estos deberán tener una oficina administrativa receptora de pedidos y deberán contar con espacio físico para la espera del servicio para las personas que trabajan, el que deberá contar con baños y lugar para refrigerio con disponibilidad de agua fría y caliente. La empresa deberá proveer a los repartidores la indumentaria y accesorios necesarios para el desarrollo de tal actividad”.

“Es fundamental trabajar en una mesa conjunta entre el Municipio, el Concejo, las empresas y sus propios trabajadores para llegar a una solución superadora. Hemos conversado e intercambiado ideas junto a la Asociación Empleados de Comercio, y coincidimos en que hay que enmarcar esta actividad. Durante todo este período de aislamiento y aún con el distanciamiento obligatorio, han cumplido una función esencial y por ello entendemos que tener una propuesta para lograr un funcionamiento óptimo y ordenado”, finalizó.

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