Eduardo Moreyra es el DT de la categoría 2014 del club Valencia, que en enero deberá mudarse de su tradicional predio de Perón al 5700. Lanzó una campaña para que sus pibes tengan botines, pelotas y elementos para entrenar.
El Club Social y Deportivo Infantil Valencia deberá dejar en enero próximo su tradicional predio de avenida Presidente Perón al 5700, esquina Pedro Lino Funes. Estuvo allí desde hace 40 años, pero una orden judicial de larga data obligó a una mudanza, que se tendrá que hacer efectiva antes del 15 de enero de 2021.
Y en eso están padres, profes y directivos de la entidad del sudoeste, que próximamente tendrá su casa en Bv. Segui y Solís. Y como allí “todo es a pulmón” –según le relata Moreyra a Redacción Rosario– son más los elementos de trabajo que faltan que los que sobran. “Desde el club trataron de quedarse, hasta que lo compró un privado y nos dieron un tiempo para buscar otro lugar”, indica el entrenador. “Así que –sigue– estamos desarmando, lo que nos puede servir para el otro predio, que pertenecía al Arzobispado, y por medio de la Municipalidad, nos dieron un comodato por 5 años, que se renueva cada 4 años”.
Toti, como todo el barrio conoce al también fundador del equipo femenino Orgullo Rosarino, se refiere a la nueva campaña solidaria para que ninguno de los pibes del club se quede sin entrenar. “Estamos necesitando botines (número del 29 al 32), pelotas, guantes de arquero, canilleras, conitos y demás equipamiento de entrenamiento, pelota Nº 4”.
“La iniciativa es para la categoría 2014, pero claro que si hay más elementos quedarán para el club”, aclara el técnico, que revela: “Teníamos algunos que venían de zapatillas a jugar por falta de botines. Como profe no me quedo sólo con dirigirlos, también me preocupan sus condiciones. Yo jugué en zapatillas, sé lo que es. Y cuando me pudieron comprar un botín fue algo muy lindo”.
Los interesados en dar una mano pueden escribir un WhatsApp al 341-3612166, o llamar al fijo 431-6745. “También quiero hacer rifas para pagar las planillas, las cuotas. Los papás con los que hablé quedaron contentos cuando les planteé esto”, resalta.
En diálogo con este medio, Toti cuenta que “mi esposa fabrica ropa y tenemos una máquina de estampado. Por eso pedimos donaciones de tela también y nos ahorramos dinero”, ya que “un conjunto ronda los 2 mil o 3 mil pesos”.
“No sé bien la situación de los papás de cada uno, hay varios que viven en condiciones muy humildes y no les puedo decir que tienen que pagar 3 mil pesos para un conjunto, más la cuota mensual, más la planilla, y mirá si tienen que comprar unos botines. Muchos no tienen el dinero y terminan sacando al chico del club”, admitió.
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