El rojinegro se lució en la Fortaleza frente al Granate, por la 3ª fecha de la Copa de la Liga Profesional: le propinó un 4 a 2, con el que se acomodó en la Zona 4. Fontanini, Palacios, Gentiletti y Maxi Rodríguez, responsables de la goleada. Sand descontó dos veces para el local, con el pleito ya liquidado.
El partido que no se le había dado en las dos primeras jornadas, lo tuvo en el sur del Gran Buenos Aires, donde Newell’s venció a Lanús con claridad, jugando a un alto nivel. La victoria era el único camino que le quedaba al equipo dirigido por Frank Kudelka si quería seguir en pie en el duro grupo 4, que comparte, además, con Boca y Talleres.
Hasta el primer gol de la tarde, a los 23’ a través de Fabricio Fontanini, de cabeza, el encuentro aún no se había armado. Pero ese tanto de pelota parada le abrió las puertas a la Lepra para desarrollar su juego, con Pablo Pérez y Aníbal Moreno como baluartes en la mitad de la cancha.
Ignacio Scocco no pudo aportar goles, pero sí algunos destellos de su calidad. Lo tuvo dos veces seguida: en la primera, tras hacer pasar de largo a su marca con un enganche, no pudo vulnerar la resistencia del arquero Lautaro Morales. En la siguiente, le metió un sutil caño a Alexis Pérez, quien alcanzó a recuperarse para bloquear el disparo que tenía destino de red.
El dominio rojinegro, que en esta ocasión lució de blanco, se extendió en el segundo tiempo. A los 9’ transformó en gol un arrollador contraataque, que se inició con Sebastián Palacio recuperando cerca del área propia, y tras una larga conducción de Moreno, culminó con la definición del propio Tucu, que tuvo su premio por acompañar la jugada hasta el final.
Cuando el conjunto del Parque Independencia ni sufría en su área, apareció otro tanto de pelota parada, para liquidar la cosa. En este caso fue desde un córner, y el que puso la cabeza para el gol fue el otro central, Santiago Gentiletti, a los 22’.
Después vinieron dos goles juntos, uno para cada uno. José Sand, como casi siempre, aportó el primer tanto para el dueño de casa, cuando corrían 27’. Pero con el festejo Granate todavía fresco, apareció Maxi Rodríguez a los 28’ para empujar un buscapié que lanzó Palacios.
Ramiro Macagno, juvenil arquero que reemplazó al lesionado Alan Aguerre, se pudo lucir con una buena tapada ante el ingresado Matías Esquivel, con la poca visión que ofrecía la montonera en el área. Ya con el tiempo cumplido, no pudo contener el cercano cabezazo de Pepe Sand, a los 49’, que disimuló la goleada.
Newell’s ganó, gustó y goleó. Una fórmula que necesitaba mucho, no sólo para posicionarse mejor en el denominado grupo de la muerte –en el que no sumaba puntos– sino para cambiar la imagen que había dejado en las dos primeras fechas. Con Boca como mayor candidato a quedarse con la zona, Talleres –rival del próximo fin de semana– parece posicionarse como un oponente directo en la lucha por la clasificación.
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