La ciudad no tiene paz y la sensación de inseguridad, condimentada con un sinfín de balaceras y ataques violetos abruma a los rosarinos y rosarinas. tomada por las balas. Este miércoles por la noche, volvieron a vivir horas de terror cuando, en dos diferentes balaceras, murieron dos jóvenes de 25 años y resultó herido un niño de 9 años.

El primero de los episodios ocurrió en inmediaciones de Cavia al 1200, alrededor de las 21, cuando dos sujetos en moto atentaron contra un grupo de vecinos que se encontraban en la zona. En el ataque resultaron heridas cuatro personas que fueron trasladados al Hospital Alberdi. Dos de ellos, identificados como Lionel Nahuel S. y Kevin Gabriel M. ambos de 25 años, fallecieron poco después. Otro de los heridos, un joven de 28 años, se encuentra en estado crítico y fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez.

Poco después de ese ataque se produjo una segunda balacera, a pocos metros de ese lugar, en Cabassa al 2100. Una mujer de 29 años y su hijo de 9 realizaban una compra en un almacén de la zona cuando tres hombres que iban a bordo de dos motos pasaron por allí y abrieron fuego contra un grupo que estaba en la vereda.

Algunos de los plomos alcanzaron al nene, provocándole heridas en glúteo derecho y muslo y tobillo izquierdo. Francisco fue llevado por su mamá al Hospital de Niños Zona Norte donde debió ser intervenido quirúrgicamente.

En ésta última balacera también resultaron heridas otras dos personas, un hombre y una mujer, que sufrieron lesiones leves.

Cuadro grave

El niño de 9 años baleado este miércoles por la noche, en Cavia y Gallardo se encuentra en muy grave estado y tuvo que ser operado durante la madrugada de este jueves. La información fue emitida por la directora del hospital de Niños, Mónica Jurado.

Francisco fue alcanzado por las balas este miércoles por la noche cuando acompañaba a su mamá mientras hacía las compras para la cena. Ambos fueron sorprendidos por sujetos en moto que abrieron fuego sin mediar palabra. Según detalló Jurado, el nene de 9 años llegó al centro de salud este miércoles alrededor de las 21.45, en un auto particular manejado por sus familiares. Tenía una herida de arma de fuego con orificio de entrada en región lumbar derecha y salida en muslo izquierdo.

El niño ingresó con “un shock hemorrágico” por lo que requirió luego de estabilizarlo ser intervenido quirúrgicamente. Asimismo, detallaron que se encuentra con ventilación mecánica y con soporte de drogas vasoactivas. “Su cuadro es muy grave con pronóstico reservado”, remarcó la directora del nosocomio.

Fuente: Conclusión

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