Sonia Beatriz González

“¡Festejamos 10 años de ser La Sonia! Nos encontramos en el patio de la escuela para seguir escribiendo historia!”, dice la tarjeta de invitación de la Escuela Secundaria N° 551 Sonia Beatriz González que circula por las redes sociales y convoca a celebrar, este lunes 17, a las 18.30. Es la primera escuela en la provincia en recordar con su nombre a una víctima de la dictadura cívico militar.

“Vamos a hacer una fiesta”, anticipa la directora de la secundaria de Ayolas y Grandoli, Melina Barsola. La propuesta es que “este día de festejo por el nombre de la escuela no sea un acto, sino un cumpleaños y un disfrute, que sea un momento de encuentro”, sin apuros y formalidades a resolver en el medio.

Esa idea de encuentro tiene también la intención de afianzar los vínculos afectados por la pandemia, en especial en los primeros años. Algo que es importante en una escuela que “emplaza su construcción pedagógica dentro de lo afectivo”, dice la directora. Por eso están en la tarea de volver a trabajar sobre la convivencia, desde la historia de la escuela y en especial desde su nombre, “algo que generalmente se hacía en el día a día”.

“Son los 10 años de tener un nombre, que fue elegido por nosotros, que fue una construcción colectiva y que representa una de las grandes patas de trabajo de la institución que es la memoria”, rescata Melina de lo valioso de llamarse Sonia Beatriz González.

Considera que esa tarea es permanente, para que no pase el tiempo y se olvide: “Si no es como que se cree que todas las escuelas nacen con un nombre. Y no es así. Teníamos un número. Fue una construcción, fue una lucha, fue empoderarnos de ese nombre y construir con ese nombre hacia adentro y hacia afuera. Con todas las lógicas que eso implicaba, plantarse y decir que somos una escuela que construye la memoria, la construimos y reconstruimos constantemente y la tenemos como bandera de lucha”.

La directora habla de la amplitud de sentidos de la memoria que defienden, ya sea “haciendo hincapié en el nombre de Sonia como en la memoria que reconstruye en cualquier momento histórico a los sujetos que habitan el territorio”. “Porque también -remarca- luchamos por la  memoria de cada uno de esos pibes que murieron en una balacera, por no tener remedios para enfrentar una enfermedad, o ser más vulnerables en ciertas situaciones y que también perdieron la vida”.

Escuela 551 Sonia B. González
La secundaria de Tablada, de Ayolas y Grandoli. Foto: Escuela 551 Sonia B. González

“La Sonia”

La Escuela Secundaria N° 551 se creó en 2008, sobre los que eran los 8° y 9° años de la EGB de la Primaria 6.430 (funcionan en el mismo edificio). En 2012 por votación de sus estudiantes y docentes eligió llamarse Sonia Beatriz González Abalos, en homenaje a la joven detenida desaparecida por la última dictadura cívico militar. Sonia tenía 18 años, trabajaba en el Frigorífico Swift y se la llevaron de su casa de Centeno y Necochea el 14 de julio de 1976.

Durante casi un año docentes y estudiantes de la 551 trabajaron sobre cómo llamar a su escuela. Al final eligieron entre las propuestas de nombrarse Sonia Beatriz González, María Elena Walsh, León Gieco y Barrio Tablada.

La votación se inclinó por mayoría por el nombre de Sonia Beatriz González, “La Sonia”, como hoy mejor eligen llamarla. En ese momento, las y los estudiantes afirmaron que la decisión se tomaba para tener presente “la memoria, la vida y la alegría”.

 Es la primera escuela santafesina en hacer memoria con su nombre a las víctimas del Terrorismo de Estado.La aprobación final de la denominación por parte del  Ministerio de Educación de Santa Fe llegó el 16 de octubre de 2012.

El trámite de imposición del nombre siguió los pasos requeridos oficialmente, sin embargo también debió atravesar insólitas decisiones de funcionarias de Educación provincial que no aceptaban el nombre de la joven por no encuadrarse «en la normativa vigente».

La fiesta, el viaje y los libros

La fiesta de este lunes será un pic nic. La escuela se prepara con banderines de colores y las y los estudiantes prometen volver a poner en marcha su proyecto Llévame contigo, que consiste en regalar libros con tarjetas y mensajes. La iniciativa se hacía antes de la pandemia, se suspendió por esa razón y ahora se retoma.

Además de pic nic, habrá un buffet a cargo de las y los estudiantes de 5° año que recaudan fondos para su viaje de egresados, a Embalse Río Tercero, que será el próximo 8 de noviembre. Para ese mismo fin también organizaron unos juegos con premios.

“La idea es celebrar el nombre. Tenemos nombre y lo celebramos. Lo hacemos cada uno de los días que habitamos la escuela y nosotros como comunidad. Es un motivo de celebración y la lucha también lo es”, valora la directora.

Cuando Melina Barsola habla del nombre de su escuela a cargo lo hace poniendo el acento en el sentido de identidad. Dice entonces que uno de esos sentidos es el de la memoria, otro la forma en la que definen su trabajo pedagógico. Y en esa mención, resalta el trabajo por trayectorias educativas.

“Una de las grandes patas que tenemos en la escuela es esto de tener trayectorias. Es salir de ese punto de partida que nos colectiviza a todos, que es la escuela, pero después reconocer que cada uno tiene una situación diferente”, dice y describe que la meta es que asistan a la escuela, “porque creemos que es el lugar donde deben estar, porque es su derecho; pero también entendemos que hay un entramado de situaciones que tocan sus vidas”. La tarea que se da La Sonia es la de “tratar de construir una trayectoria para cada uno, que permita habitar la institución de diferentes modos, pero habitarla”.

Escuela Sonia B. González
La secundaria de Tablada sostiene un proyecto pedagógico que mira a cada estudiante. Foto: Escuela Sonia B. González

La escuela, un refugio

La fiesta de este lunes se proyecta como una propuesta para recuperar los sitios y los momentos de encuentro desplazados por la pandemia. “Seguimos con algunos coletazos de recomponernos de eso, pero también de todas las situaciones violentas y de las incertidumbres en las que vivimos”, recuerda la directora.

Rescata a la escuela como un lugar que “llena de energía y fuerzas para seguir adelante”, más allá de las injustas miradas que muchas veces devuelve la sociedad sobre el trabajo docente.

La educadora defiende el encanto de sul oficio en tanto permite construir “una sonrisa, un derecho más, una posibilidad más para los pibes”. “La escuela sigue siendo un refugio para cada uno de ellos y de los que estamos; un refugio amoroso, un refugio de sostén y del aprendizaje. Porque nosotros, los docentes, también aprendemos constantemente. Podemos dar una serie de herramientas conceptuales, pero los pibes nos enseñan de fortalezas y de ponerles pilas”.

Escuela Sonia B. González
«La escuela es un refugio amoroso, un sostén de aprendizajes», dice la directora Barsola. Foto: Escuela Sonia B. González

Lucha histórica

A la secundaria de Tablada asisten 300 estudiantes en dos turnos. Pero la posibilidad de asistir a uno u otro turno es para los tres primeros años. Los 4° y 5° solo pueden ir a clases por la mañana.

“Tenemos una lucha histórica”, dice Melina Barsola de un reclamo que ya lleva ocho años ante el Ministerio de Educación de la provincia para que se abra la oportunidad de los dos turnos para todos los cursos.

En esta escuela un buen número de estudiantes llega al final de la secundaria. Podrían ser más si tuvieran asegurado el derecho de asistir por la mañana o por la tarde. Muchos trabajan por la mañana, ya sea cuidando hermanos, en tareas de limpieza o haciendo de albañiles, entonces prefieren dejar un año y luego anotarse para terminar la secundaria en una Eempa.

La directora recuerda que la intención también es sumar la orientación en comunicación -tiene solo la de ciencias sociales-, en tanto abre más posibilidades laborales y aprovechar la cercanía “con la Vigil y la Siberia”. Pero sobre todo para que las chicas y los chicos permanezcan, no sean excluidos de la oportunidad de estudiar.  “Estar en la escuela es tener la posibilidad de seguir proyectando ser alguien”, defiende la directora de La Sonia.

 

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