Amenazado antes de asumir
Alberto Fernández ya recibió advertencias preventivas de diferentes factores de poder. Luego de haber destrozado el aparato productivo, el establishment ahora niega su aporte a la necesaria reconstrucción de la Argentina.
Alberto Fernández ya recibió advertencias preventivas de diferentes factores de poder. Luego de haber destrozado el aparato productivo, el establishment ahora niega su aporte a la necesaria reconstrucción de la Argentina.
Cuando el mandatario saliente anunció el crédito stand by del FMI, omitió decir que no cumplió con uno solo de los requisitos previos que la ley obliga. Eso permite al Estado reclamar que afronte con su patrimonio el perjuicio.
Las palabras de la antropóloga y referente feminista Rita Segato respecto de los acontecimientos recientes en Bolivia merecen algunas reflexiones políticas y algunas consideraciones sociales y relacionadas con el género.
El rol del mandatario electo en la salida de Evo sano y salvo de Bolivia fue determinante y el eje México-Argentina tiende a consolidarse. Será necesario, ante un escenario en el que la oposición puede apelar incluso a una asonada
Entre las tácticas de tierra arrasada que lleva adelante el régimen saliente, se destacan dos: el nombramiento en cargos gerenciales de sus capitanes y coroneles, y la victimización de quienes dicen ser prematuramente perseguidos
Nunca como en la última semana –desde hace cuatro años– fue tan notoria la intrascendencia de Mauricio Macri en la escena política nacional. Alberto Fernández en México y Lula liberado en Brasil lo eclipsaron en forma impiadosa.
Una mirada sobre el documento que el Gobierno en retirada propone dejar como relato ficcional de una gestión catastrófica en lo económico, social e institucional, pero que el sistema de medios hegemónico reproduce sin críticas.
Macri discute consigo mismo si hará oposición o irá a Boca. El dispositivo mediático le baja el precio a la victoria de la fórmula FF. El establishment, en tanto, envía mensajes para condicionar al nuevo gobierno.
La Argentina no está ajena a la ola de protestas sociales que se eleva en el continente en respuesta al crimen neoliberal, sólo que la lucha fue canalizada a través de la política, cuyo catalizador, una vez más, es el peronismo.
Las elecciones ofrecen una oportunidad –acaso la última– para que la Argentina interrumpa de una vez y para siempre el histórico carácter pendular que la hace oscilar entre un modelo de Nación desarrollada y otro de rapiña.