Como suele pasar cada cuatro años, un pool conformado por las multinacionales que dominan el mundo realiza una demostración de poder bajo la denominación genérica de Campeonato Mundial de Fútbol.
Como suele pasar cada cuatro años, un pool conformado por las multinacionales que dominan el mundo realiza una demostración de poder bajo la denominación genérica de Campeonato Mundial de Fútbol.
“… todos los ciudadanos o militares que tuvieran algo que declarar contra el general Belgrano”, fueron convocados para el proceso que se inició el 6 de junio de 1811 por denuncias de mal desempeño de don Manuel en el ejército que marchó al Paraguay.
El teniente coronel (re) Víctor Hugo Chuly Rodríguez está procesado por el secuestro, torturas y posterior homicidio de dos militantes sobre el final de la última dictadura. Veterano de Malvinas y presidente de la asociación cultural "Cuna de la Bandera", el último verano consiguió un permiso de diez días para realizar el Cruce de los Andes. Repudiado por organismos de derechos humanos, un fiscal recurrió el permiso ante la Cámara Federal rosarina, que recién resolvió la cuestión la semana pasada, cuando sólo faltaban siete días para que comenzara el invierno y nada había por hacer con el viaje del represor.
“Otra vez sopa, otra vez Tabaré”, dijo el tipo al informarse sobre los resultados de la interna del Frente Amplio en Uruguay. “Para mí que salga con papas, y sin Marines, si no es mucho pedir”, agregó, enigmático, antes de decir algo en inglés y continuar con su entrenamiento para convertirse en un Navy Seal del Río de la Plata.
Mientras camino hacia el bar donde me encontraré con Federico Riva y Mariano Ruggieri ensayo mentalmente la apertura de esta nota. Algo así: “El nombre resuena hace ya algunos años en festivales, recitales y actividades más difíciles de clasificar. Hemos visto sus logos, invitaciones y firmas en redes sociales, páginas y flyers.
La controvertida ordenanza municipal de espectáculos públicos de Rosario es un mamotreto que pretende regular el uso público de una amplia gama de espacios privados.
La primera noticia sobre los fusilamientos clandestinos de junio de 1956 me llegó en forma casual, a fines de ese año, en un café de La Plata donde se jugaba al ajedrez, se hablaba más de Keres o Nimzovitch que de Aramburu y Rojas, y la única maniobra militar que gozaba de algún renombre era el ataque a la bayoneta de Schlechter en la apertura siciliana.
Entre nosotros había algunos con espíritu comunicativo que, más que informarse, querían entrar en contacto, lanzando y recibiendo señales extramuros de la ciudad. Muchos tocaban en bandas. Otros no, como Zalo, que decidió editar Movimiento Underground “convencido de que no todos podíamos tocar la guitarra y cantar, que alguno se tenía que dedicar al bajo, otro a la batería y, sobre todo, alguien tenía que difundir las bandas”. Difundir, palabra clave en esa flexible división social del trabajo que, casi enseguida, incorporó otros elementos además de las bandas: ideas, poesías, gráficas.
Desde su título hasta los enfoques posibles –dedicamos ocho páginas y nos quedaron varias miradas afuera–, el último número de El Eslabón vino muy debatido en esta redacción, en la previa a su salida. “Lo de Ramonet sobre el periodismo militante descolocó a más de uno”, contó Eugenia, una de las compañeras que fue a cubrir la charla que dio el martes 3 de mayo.
Internet no es la panacea del periodismo porque cualquiera pueda decir lo que le plazca, sino porque puede fundamentar lo que le plazca para un público interesado y real, que se puede seguir y calibrar; cosa que no pasa en los medios tradicionales que tratan de ganarse un lugar en la web a costa de ningunear y desoír los criterios editoriales que Wikipedia instituyó hace rato.