El Sindicato de Prensa de Rosario (SPR) defendió ante la Comisión Bicameral para la modificación y unificación de los códigos Civil y Comercial, su propuesta de incorporar la doctrina de la real malicia, para proteger el trabajo periodístico, la libertad de expresión y el derecho a la información.
Alicia Simeoni, secretaria adjunta del SPR y en representación además de la Federación de Trabajadores de la Cultura y la Comunicación (Fetraccom) y la CTA expuso este martes en el Congreso Nacional, la ponencia presentada ante la Comisión Bicameral para la Reforma, Actualización y Unificación de los códigos Civil y Comercial de la Nación.
Allí propuso la incorporación de la doctrina de la real malicia como ley. Del mismo modo, expondrá la ponencia el próximo 10 de septiembre, a partir de las 9 en la audiencia pública que se realizará en la ciudad, en la Sede de Gobierno de la UNR.
“La implementación de la doctrina de la real malicia impediría la sanción a partir de opiniones e información vertidas en el ejercicio de su trabajo, en el caso de los periodistas en particular, y de la libertad de expresión de cualquier ciudadano” informó Simeoni a Redacción Rosario.
En este sentido, aclaró que “esta iniciativa no tiene por finalidad ignorar el derecho a la intimidad ni al honor de las personas, sino de garantizar la mayor circulación de ideas plurales y de información y aun de opiniones que sirven para que las personas construyan su visión del mundo para tomar sus decisiones dentro de un sistema democrático”, sentenció Simeoni.
Por ello, de esta doctrina “surge la mayor tolerancia que deben tener los funcionarios públicos frente a afirmaciones y apreciaciones vertidas por periodistas y ciudadanos en general en ejercicio del control democrático”, subrayó.
Si bien el delito de calumnia e injuria fue derogado del Código Penal, a pedido de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos al Estado argentino, con el precedente que sentó el caso Kimel, sigue vigente en el actual Código Civil.
El sindicato recuerda que este fue el medio de persecución y amedrentamiento para que la autocensura y la censura operen como fuertísimos condicionantes y el trabajador de prensa no continúe sus investigaciones o no publique la información de interés público.
“En Rosario son muchos los compañeros periodistas que fueron demandados por funcionarios públicos o personas públicas y en cada caso particular, la doctrina de la real malicia a sido utilizada como recurso de defensa y en otras no, de acuerdo al criterio de cada juez de instrucción”, explicó la dirigente gremial.
Asimismo, Simeoni apuntó a “la necesidad” de que la doctrina de la real malicia se convierta en ley, ya que no quedaría a criterio de los jueces en cada caso, sino que aplicaría en todos los casos en el que un funcionario público o persona publica se sintiera ofendido ante una opinión o la difusión de información que considere agraviante y quiera realizar una demanda contra el periodista.
“El criterio puede hacerse extensivo hacia aquellas personas que sin ser funcionarios públicos protagonizan hechos o situaciones que son de interés público, es decir aquellas personas que se exponen voluntariamente a la consideración publica”, señaló Simeoni y citó como ejemplo el juicio que Eduardo J. López inició contra el periodista Carlos Del Frade a raíz de una nota publicada en el periódico El Eslabón, cuando el demandante era por aquel entonces presidente del Club Atlético Newell’s Old Boys.
“La doctrina de la real malicia lo que hace es invertir la carga de la prueba. Esto quiere decir que, no es el periodista sino el ofendido el que tiene que demostrar que aquello que se publicó es información errónea o inexacta, o que fuera producto de un acto de mala fe por parte del trabajador de prensa”, explicó Simeoni.
Por último, la secretaria adjunta del SPR observó que “este nuevo código necesita incorporar una cantidad de nuevos derechos a la luz de las nuevas necesidades que surgen en los tiempos que corren. Por ejemplo, antes que yo, expusieron representantes de pueblos originarios por la defensa de la tierra. De nuestra parte, esperamos que el Congreso convierta en ley la doctrina de la real malicia no sólo en protección del trabajo periodístico sino de la opinión publica en general.”
Esta iniciativa será acompañada además por la Asociación de Prensa de Santa Fe, y los gremios de Tucumán y Mar del Plata.
