Se cerró una semana de pesadilla para los medios opositores y la dirigencia política por ellos editorializada. Sucede que en la Argentina actual existen periodistas opositores que actúan como políticos, y como triste contrafigura, políticos opositores que juegan a ser periodistas, bastante malos por cierto.
Observemos la mala racha de la “opo” en seis capítulos:
1. El radical Ernesto Sanz daba por perdida la recuperación de la Fragata Libertad, y el Tribunal del Mar fijó el 22 de diciembre como límite para el retiro de la nave de Ghana por considerar que un buque de guerra encarna «una expresión de la soberanía», como lo sostuvo Cristina Kirchner en su momento.
2. Especulaba el PRO, con Sturzeneeger a la cabeza, con la apertura del canje y el pago a los hold outs basados en la solidez e irreversibilidad del fallo de Griesa. La Corte de Apelaciones de Nueva York hizo lugar al pedido del Gobierno para que suspenda la resolución del magistrado, y hasta el gobierno norteamericano apoyó la posición argentina, en sintonía con lo dicho por Cristina cuando quitó toda racionalidad al fallo.
3. Martín Redrado afirmaba que probablemente Argentina ingresaría al “default técnico” tras el fallo Griesa, y hasta operaron coordinadas “calificadoras de riesgo” que bajaron la nota al país. La Argentina canceló U$S 3.520 millones correspondientes al cupón PBI, en tiempo y forma como se comprometió la Presidenta y por lo cual la deuda pública en moneda extranjera con privados alcanza al 9,1% del PIB, la más baja proporción en la serie de desendeudamiento iniciada en el año 2005.
4. Oscar Aguad insistía con la caída de confianza tras la recuperación por parte del Estado del 51% de las acciones de YPF y, como respuesta efectiva, se observó la masiva suscripción de obligaciones negociables de YPF para inversores minoristas, con vencimiento a un año, que se tuvo que ampliar de 50 millones de pesos a 150 millones de pesos, respondiendo a la confianza y apoyo que brindó la Presidenta, quien consideró la recuperación de YPF “Causa Nacional”.
5. Tras la vergonzosa sentencia del tribunal tucumano en el caso Marita Verón, la Presidenta volvió a la carga con la existencia de “fierros judiciales” , repudio de manera fulminante el fallo , se solidarizó con Susana Trimarco, desautorizó a sus propios dirigentes que no estuvieron a la altura de las circunstancias, y dio impulso a la extensión de las sesiones parlamentarias para aprobar la nueva Ley de Trata, anticipándose a la reacción de la Lilita Carrió que pretendió manipular la opinión pública para sacar ventaja política del horrible caso, circunscribiendo el escándalo a la provincia de Tucumán, cuyo gobernador es oficialista.
6. Finalmente, contra lo sostenido por Mauricio Macri el juez Horacio Alfonso declaró constitucional la Ley de Medios y ordenó levantar la cautelar contra los artículos 161 y 45, tal como lo sostuvo la Presidenta en cada intervención a propósito de la necesidad de aplicar la norma.
No es de extrañar entonces que frente a las pifias opositoras y el prestigio creciente de Cristina Kirchner, sus adversarios políticos sigan sin encontrar rumbo, aumentando su fragmentación al punto que si hubiera elecciones hoy, las encuestas no manipuladas muestran que el oficialismo mantendría el caudal electoral de octubre y la diferencia respecto de la segunda minoría se estiraría aún más, ya esta última semana Hermes Binner cayó al 12,7% de las preferencias.
Paga el referente del FAP la aparición de Macri en el escenario nacional que toma parte de su electorado de 2011 y en su provincia el impacto del ”affaire narcosocialista”, herencia de su gobernación, que obligó al nuevo gobernador Bonfatti a vetar doce de los dieciséis artículos de la ley 13.297 que declaró a Santa Fe en emergencia en seguridad, encontrándose entre los cuatro artículos que no vetó el que señala: «Comuníquese al Poder Ejecutivo». Una monada republicana.