El ex presidente sudafricano Nelson Mandela, de 94 años, fue internado el sábado pasado por una infección pulmonar. Evoluciona favorablemente aunque permanece grave, informó el mandatario del país, Jacob Zuma, tras visitarlo en el hospital.
«Seguimos pidiendo a la gente que continúe teniendo presente en sus oraciones a Madiba (como se conoce popularmente a Mandela en su país) y le desee una rápida recuperación», aseguró Zuma tras su primera visita a Mandela desde que fue internado el sábado pasado por una infección pulmonar en un hospital de Pretoria.
El actual presidente de Sudáfrica visitó a Mandela acompañado de Zweli Mkhize, tesorero del gobernante Congreso Nacional Africano (CNA), el partido otrora liderado por el popular líder que enfrentó al régimen racista del Apartheid, informó la agencia de noticias EFE.
Horas antes de la visita presidencial, el gobierno sudafricano ya había informado que el veterano ex mandatario «respondía bien al tratamiento», una noticia que tranquilizó a la sociedad sudafricana pero también al mundo entero, que sigue de cerca la evolución médica del histórico líder.
«Debemos querer al Mandela que lideró la campaña de desobediencia civil, al Madiba revolucionario, al Madiba que pasó tanto tiempo en la cárcel», recordó el mandatario ante el Parlamento, en Ciudad del Cabo.
La internación del sábado pasado por una infección pulmonar es la cuarta que atravieza el ex mandatario desde diciembre pasado.
Mandela sufre de manera regular problemas respiratorios desde su larga estadía en las cárceles del régimen racista del Apartheid.
El entonces líder de la resistencia estuvo detenido durante 27 años, tras lo cual fue reconocido con el premio Nobel de la Paz en 1993 y, un año después, se convirtió en el primer presidente negro de su país.
Mandela también recibió este jueves a sus familiares, entre ellos sus hijas y varios de sus nietos, en su cuarto del Medi-Clinic Heart Hospital de Pretoria.
La familia del ex mandatario había agradecido ayer, a través de un comunicado, todas las expresiones de ánimo y solidaridad de la sociedad sudafricana y de otros países.
Fuente: Télam