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El Registro de Nacional de Armas (RENAR) dispondrá esta semana diversos puestos móviles de entrega voluntaria y anónima de armas de fuego en distintos puntos de Rosario, según se informó desde el organismo.
Los puestos móviles operarán de 8 a 14 en la calle Hilarión de la Quintana 1866, del barrio Las Flores, donde se podrán entregar armas y municiones hasta el jueves 26; y en el Club Argentina 78 de barrio Ludueña donde la recepción se realizará desde el lunes 30 hasta el viernes 4 de julio.
La entrega también se podrá realizar en la delegación Rosario del RENAR ubicada en 9 de Julio 3393, de lunes a viernes en el horario de 8.30 a 12.30.
El director del RENAR, Matías Molle, dijo que desde el organismo se trabaja en reforzar el concepto de que tener un arma es tener un problema.
«Nuestro objetivo es romper con ciertos patrones culturales y mitos, como el de la autodefensa. La presencia de armas en los hogares potencia la posibilidad de un desenlace trágico, aumentando la posibilidad de accidentes, heridos y muertos», resaltó Molle.
En este sentido, el funcionario consideró que «la educación de nuestros hijos y la provisión de habilidades para mediar sus conflictos de manera no violenta se vuelve fundamental y la presencia de un arma en el hogar, tanto como los comportamientos agresivos o violentos, no contribuyen a lograr este objetivo».
El Programa de Nacional de Entrega Voluntaria de Armas de Fuego, vigente desde julio del 2007, consiste en la entrega voluntaria y anónima de armas a cambio de un incentivo económico, que a partir de este año oscila entre $500 y $2.000 según el tipo y calibre.
En el momento de la entrega se toma el número de serie del arma, tipo y calibre con el fin de cotejar estos datos con el registro existente verificando si cuentan con procesos judiciales para luego ser destruidas en un acto público. El material resultante es entregado a una institución de bien público.
Gracias a la política de desarme, durante la última década el Estado ya recuperó más de 156.000 armas y más de un millón de municiones a nivel nacional y se destruyeron, en forma definitiva, 272.366 armas.