El concejal Miguel Zamarini le exigió este lunes a la municipalidad que dé a conocer con “urgencia” las sanciones impuestas a las empresas del Transporte Urbano. “Queremos conocer si existe un control riguroso”, protestó.
“La situación sigue empeorando y queremos conocer si existe un control riguroso o, aunque sea, alguna respuesta concreta por parte de las autoridades competentes”, indicó el edil del bloque socialista, que buscará renovar su banca en las próximas elecciones.
El titular del Concejo lamentó que desde el Ejecutivo municipal “no se haya respondido al pedido de informes de diciembre del edil Carlos Cossia, que gira exactamente sobre lo mismo”, y recordó que “en la última sesión del Concejo se endurecieron las multas a las empresas por incumplimiento de frecuencias, alcanzado hasta 50.000 pesos por infracción”, pero advirtió que eso “no servirá de nada si la Municipalidad no las aplica como corresponde”.
Además, precisó que en su Centro de Denuncias por demoras en las frecuencias de colectivos ya se han superado los 5.000 reclamos por lo que dio por descontado que la línea 107, dependiente del municipio, recibe muchas quejas más.
“En su momento, la Secretaría de Servicios Públicos hizo hincapié en dicha vía de comunicación y desprestigió nuestro Centro de Denuncias, por lo que bien valdría la pena informar cuántas reciben y cómo las canalizan”, agregó.
Zamarini repasó los números que refleja el Centro de Denuncias, con un promedio de demoras superiores a los 25 minutos y adelantó que en las próximas semanas sus equipos técnicos darán a conocer una nueva medición de frecuencias, tal como lo hicieran en el mes de diciembre. “Volveremos a evaluar el funcionamiento de todas las líneas, una por una, para comprobar si realmente la gravedad es aún mayor de lo que aquel informe reflejaba”, sentenció.
En cuanto al debate del nuevo pliego del transporte, el edil opinó: “Descuento que el Concejo no aprobará nada a libro cerrado. Al menos yo no lo voy a hacer. Creo que hay muchas cuestiones para discutir, al margen del apuro que pueda existir por parte de algunos sectores”.
“Todos los avances que se detallen serán positivos en tanto y en cuanto se explique con claridad de dónde se van a obtener los fondos para mejorar el transporte urbano de pasajeros. Como servicio públicos debe ser subsidiado por Nación, provincia y municipio y en ese sentido habrá que anhelar que el gobierno provincial no siga brillando por su ausencia”, continuó.
Por último, dijo en este sentido que “se trata de una decisión política sobre la mejora del transporte pero fundamentalmente de a quién se le debe cargar esa responsabilidad económica”.
“Apostamos a un servicio masivo para los usuarios, con una tarifa acorde. Por ende, debe ser el Estado quien se haga cargo de los costos y no el pasajero, porque de ese modo sólo lograrían que existan menos usuarios y, por ende, el sistema fracase antes de iniciar”.